La delegada de Obras Públicas de la Junta, Ana Vinuesa, quiso ayer zanjar sobre el terreno la polémica existente por la tardanza de las obras en la A-347 que une Adra y Berja y la decisión de la administración autonómica de cortar el tráfico tras las fuertes lluvias del pasado invierno que dejaron practicamente casi intransitables 5 kilómetros de la vía.

Vinuesa, que mantuvo un encuentro con los periodistas en la carretera afectada, señaló que el corte de tráfico "sólo obedece a criterios técnicos que señalan que con el estado actual de la carretera se pone en peligro la vida de las personas".

La delegada estuvo acompañada por el Jefe de Servicio de Carreteras, Alejandro Ruiz, y el Gerente de GIASA, Carlos Camacho, que puntualizaron que el coste de la obra va a suponer una inversión de 1,9 millones de euros (de los 2,9 iniciales) y que tendrán un plazo de ejecución de seis meses. Al iniciarse los trabajos el pasado 15 de agosto, estas fuentes de han señalado que la carretera podrá vovler a reabrir al tráfico para el mes de febrero, aunque como detalló Vinuesa, "nuestra intención es abrir varios tramos antes de Navidad en los que habrá un sólo carril habilitado al existir 21 puntos conflictivos en los kilómetros afectados".

Estas mismas fuentes han señalado que los retrasos en el inicio de las obras -que suponen la mejora de las mallas de contecnión así como la construcción en algunos puntos de pilares con hasta 17 metros de profundidad- se deben "a la redacción de informes geotécnicos, su posterior aprobación y la licitación de las obras". Hay que recordar que hace 8 años se reparó la vía y se instalaron las vallas de contención con una inversión de 500 millones de pesetas.