Barry Sidney Lane, el hombre de 77 años desaparecido este domingo en Huércal-Overa ya ha aparecido. Por desgracia, los peores pronósticos se han hecho realidad y su cuerpo fue localizado este martes a última hora en Góñar, una pedanía del municipio murciano de Puerto Lumbreras. Cómo llegó allí el desaparecido, que había sufrido tiempo atrás una embolia y tenía problemas de salud, es todavía un misterio.

Lo que sí se sabe, según ha confirmado la Comandancia de Almería a este periódico, es que fue un vecino de la pedanía que realizaba labores agrícolas el que sobre las nueve de la noche se encontró con el cadáver de Barry. Hasta el lugar se trasladó una patrulla de la Guardia Civil de Huércal-Overa que confirmó que se trataba del desaparecido. El fallecido no presentaba aparentes signos de violencia y vestía la misma ropa que llevaba puesta cuando se perdió su rastro.

El cadáver fue trasladado al Instituto de Medicina Legal de Murcia después de que un juez autorizase el levantamiento del cadáver y serán los agentes del Instituto Armado de este municipio murciano los que instruyan las diligencias e investiguen lo ocurrido, con la colaboración de los agentes de Huércal-Overa.

A la hora a la que fue localizado su cuerpo, la Guardia Civil tenía previsto interrumpir la búsqueda de Barry y retomarla a primera hora del miércoles. Hasta ese momento dos patrullas de Seguridad Ciudadana y agentes del Seprona en moto, con el apoyo inestimable de la Policía Local y voluntarios habían continuado el rastreo. Horas antes, el Grupo de Emergencias de Andalucía (GREA) había desactivado el dispositivo específico en el que habían participado helicópteros de la Guardia Civil y el Infoca, agentes de Medio Ambiente con un dron, unidades caninas, Protección Civil de varios municipios..., ante la falta de resultados. Sin embargo, la esperanza no se perdió y en ningún momento el Instituto Armado dejó de buscar a Barry.