Miles familias ejidenses verán reducida la presión fiscal en su economía particular. Y es que el equipo de gobierno está realizando un gran esfuerzo para lograr reducirla en torno a un 10%. Gracias a la modificación a la baja de la ponencia catastral de valores, en casi un 80%, impuestos como las sucesiones o donaciones, la plusvalía o la trasmisión patrimonial han dejado de ser una importante carga. Así, se ha logrado corregir la enorme descompensación existente hasta el momento entre los valores catastrales y los valores reales del mercado que estaba afectando también, de manera indirecta, al potencial desarrollo económico del municipio.

Según datos proporcionados por el Consistorio, esta medida de reducción de la presión fiscal ha afectado a unas 2.400 fincas en suelo urbanizable y, además, ha supuesto un importante desahogo económico para la industria auxiliar como almacenes y cooperativas del manipulado, empresas expendedoras de fitosanitarios e incluso estaciones de servicio.

El portavoz del equipo de gobierno y concejal de Hacienda y Contratación del Consistorio, José Francisco Rivera, ha explicado que "a pesar del dramático estado económico-financiero heredado por el PAL, con una deuda que se acerca a los 360 millones de euros y que supondrá, según recoge el Plan de Ajuste, destinar durante los próximos años en torno a 30 millones de euros al pago de deuda, estamos realizando un gran esfuerzo para bajar impuestos que estaban generando importantes desequilibrios en la economía de miles de ejidenses, logrando así reducir la recaudación impositiva en el municipio".

Asimismo, el edil ha recordado que "la puesta en marcha de esta medida de alivio fiscal ha supuesto al Consistorio dejar de ingresar más de dos millones de euros en un momento muy complicado desde el punto de vista económico y en el que existen graves problemas de liquidez". La medida municipal viene a ser un ejemplo más de la buena gestión municipal y del trabajo serio y riguroso en el manejo de los recursos públicos que está realizando el gobierno municipal; no sólo se han rebajado impuestos que resultaban confiscatorios, sino que también se están afrontando las obligaciones de pago en tiempo y forma y saldando deudas pendientes del PAL con proveedores contraídas en 2006, y realizando inversiones prioritarias.