La Junta de Andalucía aprueba hoy tras más de un año de trabajo el esperado decreto que permitirá, en su mayoría, la regularización de viviendas, casi trece mil entre el Levante y Almanzora, fuera de ordenación. Un año largo de embarazo más el parto de una medida administrativa tardía para algunos e incompleta para otros. Tardía, porque muchos propietarios británicos se han vuelto a su país ante la inseguridad jurídica, amén de los engaños, que han encontrado en España aunque bien es cierto que no todos obraron de buena fe, hubo excepciones por aquello de a río revuelto. Incompleta e injusta, en opinión de otros propietarios igualmente británicos puesto que, en su opinión, habrán de pagar dos veces por lo mismo: las infraestructuras.

Ayer, minutos antes de la visita, un automóvil atropellaba a uno de los perros de los señores Prior. ¡Vaya por Dios! justo el día que Helen y Len "lamentaban el cuarto vejatorio aniversario del derribo de su vivienda". Un nueve de enero del 2008 las máquinas demolieron la casa de los Prior en Vera, las Administraciones se descalabraron la cabeza con las leyes, Almería salió vergonzosamente en los telediarios del mundo, y el pánico se hizo Obras Públicas que habita entre licencias de obras legalmente concedidas, escrituras notarialmente rubricadas, estafas y listos, muchos listos. Entre ellos, el Delegado aquél que en mala hora pidió en el juzgado ejecución de sentencia. Entre ellos, el Alcalde aquél que en mala hora no cumplió el fallo judicial que obligaba al Ayuntamiento de Vera a pagar el alquiler de una vivienda similar a la derribada de los señores Prior.

En esta cuarta estación del calvario, los Prior esperan que los Tribunales dictaminen la cuantía económica que el Ayuntamiento de Vera ha de abonarles. El Ayuntamiento de Vera recurrirá para que quien pague sea la Junta de Andalucía. Los Prior lo saben y a pesar de ello no quieren marcharse de España, de Vera, quieren su casa. Los Prior saben que pasará tiempo hasta que eso llegue, si llega, pero no les importa esperar a pesar de las humillaciones a que de cuando en cuando son sometidos. Sin ir más lejos, el pasado verano, a instancias de un Alcalde que ya no está, Helen y Len Prior se vieron en la obligación denigrante de pasar un examen psiquiátrico y no uno cualquiera, no. Dos sesiones de cuatro horas cada una en las que tuvieron que responder a más de setecientas preguntas, incluidas lindezas tales como: ¿usted ha delinquido de joven? ¿Tiene usted hábitos sexuales 'especiales'?.

Sí, hoy miles de convecinos británicos del Levante y Almanzora verán algo de luz en el despropósito conocido, cuando no consentido, de las viviendas fuera de ordenación. Sí, ayer los Prior, un matrimonio británico residente en Vera, cumplían el cuarto aniversario de destierro en su propia vivienda.

Para otros, la noticia de la aprobación hoy del decreto por parte del Cosnejo de Gobierno la Junta se esperaba "como agua de mayo" tal y como afirma el alcalde de Cantoria, Pedro María Llamas. Para el regidor, "es una gran noticia", aunque matiza que "si de algo adolece, esperemos que haya una segunda fase para que esto prospere y siga adelante". En la misma línea se expresa el regidor de Albanchez, Francisco Sánchez, que espera que con el decreto en una mno y el Plan General de Ordenación Urbana de la localidad en otra "podamos salvar el 100% de las viviendas afectadas", cifradas en algo más de cien. Sánchez explica que tanto la consejera de Obras Públicas, Josefina Cruz Villalón, como el delegado en Almería, José Manuel Ortiz, "me han transmitido que el objetivo es legalizar la inmensa mayoría excepto las que vayan en suelo protegido".

En este sentido, Ortiz ha apuntado a este periódico que su puesta en funcionamiento tendrá lugar para la semana que viene "tras su publicación dentro de cuatro o cinco días en el BOJA". En ese momento, señala, "nos pondremos a trabajar con los técnicos de los ayuntamientos afectados -un total de diez- para proyectar esta herramienta en sus planeamientos y dar soluciones".

En esa línea incide el regidor de Albox, José García, que apunta que "lo que tenemos que hacer es no perder ni un minuto más de tiempo y ponernos a trabajar porque tenemos unas 500 viviendas fuera de ordenación".