Los centros de sanidad pública andaluza ha atendido a 722 urgencias relacionadas con el calor desde que el 1 de junio se activó el Plan de Prevención de los Efectos de las Temperaturas Excesivas hasta agosto. En concreto, en la provincia de Almería han atendido a 65 personas afectadas. En el ámbito de actuación andaluz, 339 fueron golpes de calor y 383 correspondieron a otras patologías relacionadas con las altas temperaturas. En el marco de esas asistencias, 214 fueron atendidos por los servicios de atención primaria, 230 por urgencias hospitalarias y 32 por los servicios de emergencias sanitarias. De las 65 personas de Almería, hubo 34 urgencias por golpes de calor y el resto son por patologías asociadas.

Por otro lado, se han contabilizado 86 alertas sanitarias de las cuales 17 han correspondido al nivel amarillo, 29 al naranja y 40 al rojo. Estos niveles dependen de la previsión de superación de umbrales establecidos para cada provincia, de modo que la amarilla es cuando perduran dos días, el novel rojo de tres a cuatro días y el nivel rojo es cuando las temperaturas se mantienen cinco días o más.

Dentro del Plan de Prevención de los Efectos de las Temperaturas Excesivas se incluye una línea de información sobre la predicción de cada provincia, esta información también la facilitan a través de la aplicación móvil 'Salud Responde'.

En cuanto al seguimiento de pacientes vulnerables, un total de 13.042 andaluces están bajo atención telefónica por la Consejería de Salud. En nuestra provincia existen 971 personas bajo vigilancia. Con este seguimiento pueden identificar los problemas del paciente y conectarlos rápidamente con las enfermeras gestoras y con profesionales de Salud Responde. También ponen en marcha los mecanismos de control y actuación necesarios para minimizar los efectos de las altas temperaturas.

La identificación de ciudadanos con mayor riesgo de vulnerabilidad la realizan los centros de Atención Primaria. Es el caso de los mayores de 65 años y pacientes frágiles que viven solos , cuyo estado de salud es débil por alguna patología crónica o por la toma de algún medicamento que pueda influir como son los antidepresivos, hipotensóres o diuréticos. Además, intensifican las visitas domiciliarias para monotorizar los signos del calor.