Los amantes de la colombicultura, el ancestral arte de criar y adiestrar palomas para convertirlas en aves mensajeras capaces de volver a su palomar desde puntos distantes y que hoy día ha derivado en un deporte que ya no tiene como finalidad llevar mensajes y sí recorrer un trayecto a la mayor velocidad posible medido mediante relojes especiales, tienen en la comarca del Almanzora su mayor adalid.

Si hace algo más de un año el municipio de Albox se convertía en el primero de toda Andalucía en aprobar una ordenanza que regulaba la colombicultura y protegía esta práctica deportiva, ahora le ha llegado el turno a Fines, que ayer publicaba en el Boletín Oficial de la Provincia de Almería, una ordenanza similar a la de su vecino de la comarca con objeto de "proteger, fomentar y promocionar la colombicultura como deporte", reza el escrito.

La ordenanza, que ya ha entrado en vigor, estipula que los palomos deportivos deberán portar marcas de vivos colores pintados en sus alas para ser identificados durante el vuelo y a distancia y señala que para ser propietario de una de estas aves será necesario contar con una licencia federativa en vigor expedida por la Federación Andaluza de Colombicultura.

La normativa también delimita los espacios para esta práctica deportiva y permite la tenencia de palamos para uso exclusivo deportivo en los domicilios particulares, siempre condicionado, a que el lugar escogido cuenta con las medidas higiénicas óptimas.

Además, también se establecen infracciones y sanciones económicas con el objeto de regular la tenencia y uso de los palomos deportivos.

De esta forma habrá infracciones leves, graves y muy graves. Las primeras pueden ser el contar con instalaciones inadecuadas desde el punto de vista higiénico sanitario. Abandonar un palomo deportivo será considerada una infracción grave y drogarlo o soltarlo en días y lugares prohibidos serán consideradas infracciones muy graves.

Las sanciones van desde los 60 a 300 euros en las leves, de los 300 a los 900 en las graves y desde los 900 a los 1.500 por las muy graves.