La Junta de Andalucía ha invertido casi 600.000 euros en la construcción de un carril-bici en La Puerta Verde de Roquetas de Mar que une el casco urbano con Aguadulce por la costa, con lo que da cumplida respuesta a la demanda ciudadana que, en expresión del delegado de Medio Ambiente, Clemente García, "viene a completar los trabajos iniciales y dota al municipio de un espacio único, por sus características ambientales y paisajísticas, para el ocio y el deporte".

El nuevo carril bici discurre paralelo a la senda existente, es de 3'5 metros de ancho y tiene una longitud de 1'7 kilómetros, destacando que en su construcción se están empleando materiales naturales o reciclados, consistentes en un pavimento terrizo continuo formado por calcin de vidrio reciclado, reactivos básicos y árido calibrado, lo que con el uso tranformará la capa superior en una fina arena que le confiere un aspecto más natural. Asimismo cabe reseñar que la madera empleada en vallados, pasarelas y mirador procede de varios bosques de la geografía andaluza.

Pero lo que más llama la atención ha sido la sensibilidad por la demanda social al haber aceptado muy favorablemente La Puerta Verde, ampliar su adaptación al uso y disfrute con la construcción de un parque infantil, un circuito de gimnasia y la colocación de mobiliario urbano. Para Clemente García el balance que se puede hacer de La Puerta Verde es que "ha sido muy bien acogida por los roqueteros desde el mismo día en el que se inauguró y cada día decenas de ciudadanos pasean por este espacio". "Precisamente -añade-, esta gran afluencia de personas nos ha llevado a la Consejería de Medio Ambiente a decidirnos a ampliar estas instalaciones con el objetivo de mejorar la seguridad de peatones y ciclistas para que se tenga una mayor amplitud".

Raquel Martín es la primera vez que pasa por La Puerta Verde pese a vivir en Roquetas de Mar, lo ha hecho con toda la familia en bici y la impresión que le ha causado "no es muy buena, es un poco chapucero porque han cortado la entrada a la playa" y considera necesario que vallen el nuevo carril bici que están construyendo.

Por su parte, Javier Viciana es un joven estudiante de Almería que se viene a casa de su abuelo en Aguadulce todos los fines de semana, y "cuando hace buen tiempo siempre cogemos la bicicleta". El carril por el que actualmente discurre le parece muy apto para las bici porque "no tiene baches".

Uno de los devotos de este corredor verde es Francisco Mendoza, de El Parador, al que acude con otros amigos y amigas porque "nos dedicamos al deporte y practico la bici como deporte para entrenar". Es entrenador de baloncesto y practica el duatlon y el triatlon y le parece el lugar "una maravilla que debería haber estado hecho desde muy antes". Asegura que para el atletismo no está mejor ahora "porque no sufren tantos los tobillos", si bien echa en falta "unos bancos para las personas mayores que vienen mucho por aquí".