El Palacio de Almanzora ha vuelto a ser punto de encuentro para todos aquellos vecinos de la comarca con inquietudes culturales. El pasado domingo, gracias a la iniciativa de la Asociación Salvemos el Palacio de Almanzora, cincuenta y seis artistas de la zona, llenaron cada rincón de este palacete, con sus pinturas, esculturas y todo tipo de manualidades y productos gastronómicos.

Muestra de la integración y preocupación de todos los almazories por la situación de esta joya arquitectónica, que se encuentra en fatales condiciones de conservación, es que hasta 38 de los artistas fueron extranjeros, en su mayoría británicos. Todos, sin barreras y desde la integración, participaron de la exposición, que trata una vez más de luchar por que no se olvide la reclamación de toda una comarca para que el Palacio de Almanzora, sea rehabilitado de una vez por todas de la mano de las distintas administraciones, y sea convertido en un espacio referente para la ciudadanía, la cultura y el arte en la zona.

Las paredes de La Sala Granero, de La Almazara y del Patio de Armas del Palacio, se llenaron de pinturas y manualidades, además de las mesas mostradores que se antepusieron a las paredes, creando un multicolor muestrario de cerámicas, bisutería, prendas de punto, objetos de decoración y hasta una gran variedad de internacionales y apetitosos dulces de pascua.

Más de quinientas personas disfrutaron de esta magnífica exposición, compraron detalles de arte y artesanía de cara a los regalos navideños a precios muy asequibles; contemplaron el baile por rancheras de un disciplinado conjunto de bailarinas y se envolvieron en las melodiosas notas de una guitarra que sonaban al toque de un joven maestro.

El conjunto de culturas, obras de arte y detalles que pusieron a la venta muchos artistas y artesanos de las comarca, volvía a tener como objetivo principal, seguir animando a todos los vecinos de la comarca a que se sumen al reclamo. "Hacer del Palacio de Almanzora un referente cultural en la comarca, desde donde se potencie la cultura y el turismo de todo el Valle. Un objetivo que solo podrá ser realidad si se restaura" explica Lázaro, uno de los integrantes de la Asociación, que trabaja desde hace años porque las paredes de esta joya arquitectónica no se vengan abajo. Aunque reconocen el esfuerzo que está realizando el Ayuntamiento de Cantoria para la adquisición de la totalidad del inmueble, piden premura en las distintas actuaciones y sobre todo, que la Consejería de Cultura "inicie cuanto antes el esfuerzo necesario para su restauración y puesta en valor" manifiesta el colectivo.