Los vecinos de los municipios pertenecientes a la Mancomunidad del Levante van a tener mucho que aportar en el denominado Plan de Movilidad Sostenible, y es que ayer se constituía la Mesa de Movilidad Sostenible a través de la cual se pretende conocer las diferentes opiniones tanto de empresarios, ciudadanos, colectivos, asociaciones, Ayuntamiento, y por supuesto también la propia Diputación Provincial. A partir de ahora se ha diseñado un cronograma en el que figuran citas en todos los pueblos para se aporten ideas para poder solucionar la problemática de movilidad en los municipios.

Y es que el paso de ayer es uno más dentro de este plan que se elabora con el objetivo de que sea un Plan de Movilidad medioambientalmente sostenible, que reduzca el uso de combustibles, las emisiones contaminantes como el dióxido de carbono, y los niveles de ruido, dando respuesta a las necesidades futuras de movilidad, mejorando la calidad de vida de los ciudadanos y que devuelva las calles a las personas a la vez que se encuentra repuesta a los principales problemas de movilidad que se presentan en Levante y su entorno.

En concreto la Mesa se constituyó bajo la presidencia de Luis García Collado, presidente del ente Supramunicipal, la secretaría corre a cargo de la Oficina del Cambio Climático de la Diputación Provincial y la secretaría técnica recae en la UTE GEA 21-AIT, encargada de redactar el proyecto. Asimismo son miembros todos los alcaldes que estuvieron presentes, entre ellos el de Huércal-Overa, Domingo Fernández, técnicos municipales, asociaciones, hospital, asociaciones de empresas, asociaciones de comerciantes, asociaciones de vecinos, ONGs, empresas de transportes.

La redacción del proyecto ya se se ha iniciado, en el mismo se tiende a incrementar la participación del transporte colectivo y del individual no contaminante en la satisfacción de la movilidad, tendencia básica para orientar las zonas urbanas hacia escenarios de sostenibilidad.

Hay que recordar que los objetivos generales del Plan son, entre otros, aumentar la seguridad de los viandantes en el uso de los espacios públicos, mejorar la calidad de vida de los ciudadanos del territorio y reducir los consumos energéticos que se derivan de la movilidad.