AGR Almeria

"Mi hijo fue quien impulsó la aventura ornamental"

  • La familia Rodríguez Bonilla cambió la agricultura convencional por la planta decorativa en 2002 Veral Viveros hoy es un referente en el Potos

El potos o potus tiene nombre propio en la provincia de Almería, y no es otro que el de Veral Viveros SL, un negocio familiar que nació hace ahora 14 años. Dedicados toda la vida a la agricultura convencional, los Rodríguez Bonilla se aventuraron en este reto que salió adelante exitosamente casi desde el primer día.

"Nosotros llevábamos toda la vida dedicándonos a la agricultura convencional, principalmente al tomate. Fue mi hijo, Álvaro, quien tomó la iniciativa de este cambio porque es un gran amante de las flores y de la planta ornamental en general desde siempre", explica Encarna Bonilla sobre los inicios de la empresa, impulsada por su hijo, Álvaro Rodríguez. "Él era el que más sabía, pero lo cierto es que no teníamos mucha idea. Con el tiempo hemos visto que teníamos muchos fallos que hemos ido eliminando y que nos han servido tanto para economizar en la producción como para obtener una planta de calidad óptima y muy atractiva para la comercialización", cuenta la 'madre' de la empresa, Encarna, quien ha abierto las puertas de sus 7.000 metros cuadrados de invernadero a Diario de Almería, un lugar donde el poto brilla en toda su extensión y donde se puede comprobar el gran trabajo que requiere esta planta desde que se coloca el primer esqueje en el macetero hasta que sale destino al Viejo Continente. "Nosotros llevábamos toda la vida dedicándonos a la agricultura convencional, principalmente al tomate. Fue mi hijo, Álvaro, quien tomó la iniciativa de este cambio porque es un gran amante de las flores y de la planta ornamental en general desde siempre", explica Encarna Bonilla sobre los inicios de la empresa, impulsada por su hijo, Álvaro Rodríguez. "Él era el que más sabía, pero lo cierto es que no teníamos mucha idea. Con el tiempo hemos visto que teníamos muchos fallos que hemos ido eliminando y que nos han servido tanto para economizar en la producción como para obtener una planta de calidad óptima y muy atractiva para la comercialización", cuenta la 'madre' de la empresa, Encarna, quien ha abierto las puertas de sus 7.000 metros cuadrados de invernadero a Diario de Almería, un lugar donde el poto brilla en toda su extensión y donde se puede comprobar el gran trabajo que requiere esta planta desde que se coloca el primer esqueje en el macetero hasta que sale destino al Viejo Continente.

El potos es una planta que carece de campañas y es producida durante todo el año. Eso sí, el proceso de obtención requiere de mucho trabajo. Tal es así que Veral cuenta con seis personas trabajando de base y en las épocas más fuertes de ventas, donde hay que preparar un mayor número de ejemplares diariamente, suelen contar con dos personas más.

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