Los alumnos del Ciclo Formativo de Grado Medio 'Emergencias Sanitarias', del IES Santo Domingo de El Ejido han sido los primeros almerienses en recibir la clase magistral de Francisco Javier Gil Vizuete, creador del llamado el Depev, "un dispositivo de extracción de personas en emergencia vital cuya utilización está indicada para mejorar y en el futuro esperamos sustituir las actuales técnicas de rescate, que vulneran los derechos primordiales de la integridad física y riesgos de contagio de los rescatadores durante la prestación existencial".

Así lo ha explicado el protagonista del nuevo sistema el cual ha sido reconocido por las principales sociedades científicas, administraciones públicas, colectivos profesionales y requerido por colectivos de víctimas.

Francisco Javier, ha transmitido en su charla a los alumnos que Depev proporciona una mejora sustancial en los protocolos a seguir dentro de una emergencia vital, ante la necesidad de evacuación rápida de accidentados. El creador ha insistido en que "este equipamiento no es una mejora de los equipos de movilización y tan poco de movilización de accidentados ya existentes, si no que es un equipamiento inexistente de rescate de accidentados en situaciones críticas".

A juicio de Gil, como elemento de emergencia "su utilización debería ser generalizada en todos los vehículos de transporte sanitario, pues ante la necesidad de tener que rescatar a una víctima accidentada del interior, por ejemplo de un automóvil que nos encontremos en la carretera, y por la situación emergente de no poder hacerlo con los elementos protocolarios de inmovilización e movilización, el no disponer de dicho elemento de emergencia generaría la deficiencia anteriormente comentada, se podría equiparar como el extintor de un vehículo sanitario, se utilizaría para cualquier emergencia de incendio de nuestra ambulancia o usuario de la vía".

La incorporación de dicho sistema, dentro de sus funciones primarias de garantizar la calidad al ciudadano y prevención al profesional en situaciones críticas, mejoraría secundariamente, las necesidades económicas que un accidentado traumatológico grave generaría por un rescate inadecuado, al carecer de dicho elemento.

A nivel internacional este nuevo dispositivo se eleva a público a través del Tratado de Cooperación de Patentes (PCT) y la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI), teniendo una cobertura de patentabilidad en un total de 199 países de todo el mundo.