El derribo del hotel de la playa del Algarrobico y la regeneración posterior de todo en entorno tiene ya una primera estimación de su coste: 7.320.645,61 euros. Con esta exactitud, la organización ecologista Greenpeace ha elaborado un informe que difiere de la estimación que había realizado la Junta de Andalucía y que apuntaba una cifra de 8,5 millones.

Después del aluvión de sentencias en contra de la legalidad del hotel de la playa de Carboneras y cuyo último ejemplo lo ha dado el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía que determinó en una resolución conocida el miércoles que se utilizaron "triquiñuelas para proceder a su legalización mediante el burdo mecanismo de rebajar el nivel de protección" y cuando todo parece apuntar a su demolición cuando termine este peregrinar por instancias judiciales (quedan aún 30), el colectivo ecologista que más ha hecho por denunciar su presencia en la costa de Almería, ha realizado la primera evaluación exhaustiva sobre lo que costaría que dejara de pender sobre la protección medioambiental en la provincia.

Además del coste económico, el informe elaborado por el equipo técnico de n'UNDO prevé que dicha demolición generaría 379 empleos, 530 horas de cursos, 150 personas formadas y casi 40.000 metros cúbicos de material recuperado que se podrían utilizar en la construcción de otras infraestructuras y que suponen el 98% de todo el edificio y que supondrían un ahorro de 71 toneladas de CO2 no emitido a a atmósfera.

Estas cifras contrarrestarían uno de los argumentos de aquellos que aún hoy se postulan a favor de la apertura de un hotel que, según esa opinión, "generarían un importante volumen de puestos de trabajo". Además, según reconoció la responsable de Costas de Greenpeace, Pilar Marcos, sería necesario añadir que "sobran ejemplos de temporalidad en hoteles de la zona por la sobreoferta, de EREs y proyectos a medio construir por falta de liquidez, a lo que hay que añadir el coste para las arcas públicas del abastecimiento de agua, la gestión de residuos o la necesidad de construir nuevos accesos a la zona".

Para la regeneración de toda la zona se necesitaría un total de 1.600 personas, 7 instituciones de carácter local y nacional, el concurso de 10 empresas y 20 colegios e institutos en un proyecto que tiene una duración total estimada de 24 meses.

El objetivo del informe sería el de "revertir la imagen tanto del Algarrobico como de Carboneras" y se pretende que el hotel, su derribo y el posterior replanteamiento integral de toda la zona, sean "un centro d pruebas y un punto de encuentro de I+D , además de ser un proyecto educativo de campañas de regeneración ambiental", según uno de los miembros de n'UNDO, Alejandro del Castillo, quien apuntó a que esa regeneración "debe demostrar que se trata de un sector con futuro".

La diferencia entre los costes estimados por la organización ecologista y la realizada por la Junta, el Ayuntamiento de Carboneras y la Administración General del Estado que llegó a estimar un valor de entre 100 y 300 millones de euros, son las indemnizaciones que se deberían establecer para la empresa promotora del proyecto, Azata del Sol, con las que Greenpeace no está de acuerdo, algo que fue refrendado por el TSJA que en su última sentencia determinó que el derribo puede acometerse sin pagarlas.