Una matrona o un matrón es la persona encargada del cuidado de la salud de las mujeres durante el embarazo, de la asistencia al parto y seguimiento del postparto, así como también de la regulación de la fecundidad. Así figura en la definición del término, sin que se corresponda con la realidad, tal y como ha denunciado el colectivo de matronas de la provincia, que integran más de medio centenar de profesionales.

Ellas junto al resto de matronas de Andalucía, se vestirán de color rosa el próximo 8 de marzo para acompañar a las mujeres en sus reivindicaciones y defender sus derechos. En un escrito remitido por el colectivo, han señalado que "en provincias como Almería, Córdoba, Jaén, Granada o Huelva las mujeres no reciben la misma atención sanitaria a su salud reproductiva y a su maternidad que en el resto de Andalucía o el país". "En Andalucía la vigilancia y el cuidado de las etapas del embarazo, preparación al nacimiento y postparto es realizada por otros profesionales no especialistas, que no son las matronas".

"Tampoco realizan las matronas en todos los centros del Servicio Andaluz de Salud (SAS) las actividades contempladas para la atención integral de las mujeres desde la adolescencia hasta el periodo de la menopausia, dejando fuera aspectos tan relevantes como orientación sexual, apoyo efectivo durante el postparto y lactancia, afrontamiento en pérdidas perinatales o asesoramiento en la pérdida de la fertilidad". Por ello las matronas junto con todas las mujeres de Andalucía quieren que se eliminen estas desigualdades en la atención a la salud reproductiva de las mujeres, "y pedimos que todas las andaluzas, de manera equitativa, tengan la oportunidad de recibir cuidados de calidad durante su maternidad y toda su vida fértil".

Igualmente "queremos que todos los recién nacidos de Andalucía tengan derecho a recibir una atención sanitaria integral en las primeras semanas tras el nacimiento, y que esta prestación sanitaria sea realizada por profesionales especializados en la diada madre-hijo, como son las matronas" . Existen múltiples recomendaciones y normas legales nacionales e internacionales que respaldan y avalan las competencias de las matrona en la atención a la salud de la mujer y el recién nacido, tales como; la Declaración de Fortaleza de la OMS desde 1985, Asociaciones de Matronas Europeas e Internacionales, Federación Internacional de Obstetricia y Ginecología (FIGO), Declaración de Barcelona sobre derechos de la Madre y Recién Nacido o diferentes documentos elaborados por el Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad. Todas ellas demuestran que el acceso a una matrona es el factor más importante para conseguir "mejoras en los resultados de salud de la madre y el recién nacido". La evidencia científica también respalda los beneficios de la atención dirigida por matronas, la satisfacción de las mujeres y una mayor sensación de control sobre sus cuerpos y sus maternidades. Con todo esto exigen que en todos los hospitales y centros de salud dispongan de la figura de la matrona.