Por primera vez desde que comenzara el siglo XXI, el número de españoles que están encontrando cobijo en el Centro Municipal de Acogida supera al de los inmigrantes. Es una evidencia más de los estragos que la crisis económica está provocando en las familias españolas, recogida en un informe elaborado por el Ayuntamiento de la capital, cuyos servicios de atención a las personas sin techo están al borde del colapso, habiendo perdido, además, según el PP, buena parte de las ayudas que antes recibía la capital por parte de la Junta de Andalucía.

Desde que comenzara la caída en picado de la economía, el Centro Municipal de Acogida, que tuvo que ser ampliado hace tres años, ha visto como su capacidad ha ido mermándose ante los incrementos de personas que llegan en busca de cama y comida experimentados cada año. Esta no es, lamentablemente, ninguna novedad, pero el informe de evaluación de los servicios prestados que obra en poder de la concejal de Asuntos Sociales, Aránzazu Martín, pone de manifiesto el preocupante aumento de españoles que, sin trabajo y sin casa, están acudiendo en busca de este auxilio. Los datos se han invertido y, si en 2011, el 64% de las personas atendidas era de nacionalidad extranjera, ahora son los españoles, los que en términos absolutos y porcentuales, ocupan los servicios. El informe advierte del notable aumento "de personas de origen español y de Almería, fundamentalmente jóvenes o personas mayores sin trabajo, y muchos de ellos -agrega la concejal- en pareja".

Las atenciones prestadas durante 2013 -corresponden al último informe anual-, desvelan el incremento de ciudadanos de otros puntos de España que llegan a la provincia en busca de trabajo, así como que cada vez son más las personas y familias completas que, aunque residiendo habitualmente en Almería, ocasionalmente y por diversas causas se ven privados de su alojamiento habitual, teniendo como única salida la de recurrir a los servicios que presta el Centro, alojamiento y alimentación.

El número total de personas atendidas a lo largo del año pasado ha sido de 704, lo que supone un centenar más. "Ha aumentado mucho el número de usuarios del programa de larga estancia (hasta seis meses), lo que provoca que las estancias medias sean más prolongadas", una situación problemática para el Centro cuando también se ha producido un incremento de las estancias diarias del 30%. "En la actualidad -indica el informe- se está produciendo una mayor derivación de otras instituciones de usuarios que requieren el paso de comedor y de la unidad de calle".

El número de comidas ha crecido en un 35%, una media que está siendo superada durante el mes de agosto, producto del cierre del comedor de Cáritas, llegándose incluso a proveer hasta 140 almuerzos al día con una media durante los meses estivales de 126 comidas dispensadas.

El cierre de La Milagrosa hace que el Ayuntamiento tenga que contratar un servicio de catering especial dirigido a los inmigrantes de religión musulmana para atender la festividad del Ramadán, desde el 1 de agosto hasta el 30 de septiembre, con un gasto añadido de 18.000 euros.