Después de varios meses de prueba técnicas, en la calle y en naves, y hasta de una encuesta ciudadana, el Ayuntamiento de Almería ya tiene decidido el modelo de contenedor que sustituirá a los actuales. Se llama Big.bin y los fabrica la empresa gallega Formato Verde, a la que el Consistorio, a través de la actual concesionaria de la limpieza (FCC), ha realizado el encargo de las primeras 2.000 unidades de carga lateral que serán instaladas en la ciudad antes de que finalice el año.

Con una capacidad de 3.200 litros, la nueva línea de Formato Verde destaca a primera vista por su diseño vanguardista, cuya estética ha sido merecedora del premio internacional 2013 A' Design Awards, en la categoría de mobiliario urbano, entre los 5.000 modelos de 141 nacionalidades diferentes que se presentaron a este equiparable Óscar de los contenedores. Sus formas suaves y sin huecos facilitan la limpieza de su interior.

Las pruebas técnicas, con tres meses de rodadura en la calle, han servido para comprobar su resistencia y su manejabilidad. De hecho, la empresa que los fabrica destaca de este modelo su robustez, "un contenedor hecho para durar". El material, polietileno rotomoldeado, y las piezas escogidas han sido sometidas, aseguran, a pruebas de solidez frente a posibles actos vandálicos, así como a cambios de temperaturas, por lo que los costes de mantenimiento se reducen.

Otro de los factores tenido en cuenta a la hora de decantarse el Ayuntamiento y FCC por este modelo ha sido la facilidad de uso por parte de los ciudadanos. La tapa, con unas dimensiones más reducidas, hace que sea más cómoda y ligera, contando además el Big.bin con sistemas de asistencia de apertura y cierre de suavizado. El pedal tiene un multiplicador de movimiento aunque su empleo no es imprescindible, ya que cuenta con cilindros de asistencia que permiten abrir la tapa con una fuerza de solo un kilogramo.

Estos contenedores atienden las exigencias del pliego de condiciones en el que el Ayuntamiento estipulaba su adaptación para las personas con movilidad reducida o con discapacidad al disponer de una maneta a baja altura para el accionamiento de la tapa. Incorporan, además, una placa identificativa del tipo de residuo escrita en braille para personas invidentes.

Otras de sus características es que son menos ruidosos a la hora de ser manipulados por los camiones recolectores y su sistema de alineación asegura su correcta posición en la vía pública.

De la elección de este modelo se hacía eco ayer publicaciones especializadas en el sector, en las que se detalla el periodo de pruebas a las que han sido sometidos estos contenedores y los modelos presentados por empresas de la competencia. Además de la consulta ciudadana realizada a pie de calle en primavera, abundan en los cuatro meses de pruebas técnicas, también efectuadas en las naves de FCC.

Según explican, la empresa concesionaria ha realizado más de 4.000 ciclos de descarga, el equivalente de once años, en sus instalaciones con el contenedor cargado de 300 kilogramos y midiendo en todo momento sus dilataciones y desgaste.

El resultado de la encuesta, el control sobre el deterioro y desgaste producido por los modelos puestos a prueba en tres puntos de la capital, y del examen en nave, además de las consultas a los trabajadores de la limpieza, ha sido el pedido del Ayuntamiento a Formato Verde. La empresa gallega suministrará 1.500 contenedores de residuos sólidos urbanos, 265 de papel y 320 de envases antes de que comience el próximo año.