Almería

Los médicos insisten en que la atención primaria es "maltratada" por la Junta

  • Invitan a los responsables políticos a que vivan en primera persona sus jornadas laborales

"La gran maltratada de la sanidad almeriense". Así han definido desde el Sindicato Médico Almeriense (Simeal) la Atención Primaria, un conjunto de servicios "donde los profesionales no contamos con medios ni recursos suficientes". Trabas para solicitar pruebas; menos de 10 minutos para cada paciente atendiendo a una media de 50 en una mañana; contrataciones al 75% y ahora como novedad la no reposición de profesionales jubilados. Son algunas de las denuncias que han realizado los profesionales médicos desde Simeal, quienes han detallado que en los próximos meses se esperan al menos cuatro jubilaciones en centros de salud de la capital, sin saber si serán cubiertas, o por el contrario el resto de facultativos de atención primaria tendrán que sumar pacientes a sus listas alcanzando los 1.700 por médico. "Estamos muy indignados con este asunto, y más aun pensando en la alta frecuentación, que no tardará en llegar". Mientras los médicos se quejan de la situación por la que atraviesan, el delegado de Igualdad, Salud y Políticas Sociales de la Junta en Almería, Alfredo Valdivia, ha destacado a Diario de Almería, que "desde 2008 la Junta viene realizando una apuesta muy importante en la Atención Primaria, que es la puerta de entrada al sistema sanitario público, con la puesta en marcha de 24 nuevos centros de salud en los que se han invertido 28 millones de euros. Una cantidad que ha permitido ampliar el mapa de atención en todos los municipios de la provincia". Aunque desde el sindicato médico han considerado que la creación de nuevos centros de atención primaria es algo positivo, también han apuntado que "se ponen muchas cosas en marcha sin dotarlas lo suficientemente". Con todo esto, Simeal ha llamado a los responsables políticos a ser partícipes de sus jornadas de trabajo en los centros de salud y sean testigos en primera persona de lo que supone atender a medio centenar de pacientes, más las asistencias a domicilio, al tiempo que refuerzan su formación. "Y todo a costa de la profesionalidad y la vocación de los médicos".

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