La problemática del reaparecido botellón en las calles de la capital almeriense ha unido en opiniones a los ciudadanos, a los empresarios de los locales de copas y a los sindicatos de Policía. Desde que hace un mes aproximadamente aparecieron las primera voces para reivindicar más seguridad, control y aplicación de las ordenanzas municipales, los empresarios de la noche se han involucrado más si cabe en esta tarea de erradicar los ruidos que tanto molestan a los vecinos del casco histórico de madrugada y el botellón que tanto daño le está haciendo a sus ingresos. Las normas ahora son más estrictas y la prohibición de salir a la calle con bebidas alcohólicas es tajante.

El objetivo, como indicaron a Diario de Almería varios empresarios de conocidos pubs del centro, "es colaborar para que no haya aglomeración de personas en la calle y reducir así el ruido que esto genera". Aún así, asegura que "queda lejos de su alcance obligar a los clientes a quedarse dentro del local y no hablar en la puerta, máxime si lo hacen sin bebidas y principalmente para fumar". Indican que en este caso lo único que pueden hacer es una mera "recomendación".

En el caso de los sindicatos que tienen representación en la Policía Local de Almería, como CSIF, UEMA y UPLBA, coinciden en que la falta de agentes es uno de los principales problemas que tiene la ciudad para atajar el problema del botellón.

El representante de UPLBA, José Antonio Funes, ha querido mostrar su más absoluto rechazo a las afirmaciones municipales en las que manifiestan que los agentes de Policía Local se limitaban a advertir en vez de denunciar en las actuaciones de botellón. Asegura que son informaciones "sorprendentes" porque "fue la misma corporación la que decidió no tramitar las denuncias durante varios años, al estar danzado entre varias Áreas del Ayuntamiento ya que ninguna se quería hacer cargo". En opinión de este sindicato estas afirmaciones son "mezquinas, interesadas y demuestran una absoluta dejadez de responsabilidades por parte de los responsables municipales", al tiempo que señalan directamente al alcalde por ser el "máximo responsable del problema, tanto por acción como por omisión".

Con frecuencia todos los sindicatos con representación en la Policía Local de Almería han advertido sobre las consecuencias que traerían en el tiempo el "abandono sistemático de la corporación hacia la Policía Local", donde, indican, "es insostenible la situación laboral precaria a la que nos enfrentamos todos los días, especialmente la falta de efectivos".

Desde UPLBA recuerda al alcalde, que ha convocado la Junta Local de Seguridad, que todas las molestias que reclaman los vecinos: ruidos, botellón, orinar en la vía pública, sacar bebidas fuera de los establecimientos, control de horarios de establecimientos, etc., la Policía Local es la única competente para denunciar, y que el Cuerpo Nacional de Policía cuando es requerido o localiza alguno de estos problemas requiere a la Policía Local para que los solucione. Desde este sindicato insisten en que "lo primero que tiene que plantearse el alcalde es el modelo de Policía Local que debe de tener la capital y dejarse de parches y malos arreglos".

Todos los sindicatos han anunciado que están dispuestos a colaborar, incluso han aportado propuestas a los técnicos para incrementar los turnos durante los fines de semana, pero lamentan que no se les escuche. Concretamente el portavoz del sindicato UEMA, Aitor Pérez, ha apostado por la creación de una unidad de agentes que actuarían de jueves a sábados solventando el problema con garantías de seguridad. CSIF pide ampliar la plantilla.