Almería

Adiós a San Francisco de Asís, hola Santa Teresa de Jesús

  • La Hermandad de la Caridad realizó ayer el traslado y desde hoy pertenece ya a la feligresía de Oliveros

San Francisco de Asís ya es historia. La iglesia parroquial que vio nacer y crecer a la Hermandad de la Caridad se quedó ayer vacía después de que la corporación del Viernes Santo trasladase todo su patrimonio, enseres, insignias y a los tres titulares hasta la Iglesia de Santa Teresa de Jesús, nueva sede canónica de la cofradía.

A las 17:30 horas se abrió la puerta de la Parroquia de San Francisco de Asís, en el barrio del Quemadero. La cruz de guía, con la sábana blanca como cada Viernes Santo, y flanqueada por cuatro faroles de mano, fue la primera en salir. Detrás, el cortejo de hermanos, vestidos de riguroso oscuro y portando el cirio de la corporación. Tras ello, el estandarte corporativo de la hermandad, flanqueado por cuatro miembros de la Junta Directiva también portando cirio.

La presidencia, con el consiliario de la Agrupación de Hermandades y Cofradías, José María Sánchez, y la presidenta de la misma, Encarni Molina, precedió las andas de los titulares de la hermandad.

El cuerpo de acólitos acompañó a las mismas junto delante. El Santísimo Cristo de la Caridad, María Santísima de las Penas y Santa Marta fueron portados en unas andas por su cuadrilla de costaleros, comandados por el capataz Antonio Cárdenas.

Con rigurosa solemnidad y recogimiento, la hermandad se adentró en la calle de la Fuentecica hasta llegar a la Plaza del Quemadero y decir el último adiós al barrio que le vio nacer hace 20 años, en 1995.

El cortejo prosiguió por la calle Restoy para enfilar la calle Ramos y desembocar en la rambla Alfareros, pasando por la Iglesia de San Agustín que durante tantos años los ha acogido para realizar su salida el Viernes Santo debido a las dimensiones de su ya antigua sede canónica, la Parroquia de San Francisco de Asís. Allí los recibió la Hermandad del Silencio justo en la puerta.

La hermandad se adentró en el centro bajando por Pablo Iglesias hasta Puerta Purchena dirección hacia la Iglesia de Santiago, donde les esperó la Cofradía de la Soledad. La corporación bajó por Plaza Flores hasta San Pedro, como en su itinerario habitual del Viernes Santo. La hermandad siguió por: Méndez Núñez, Javier Sanz, Eguilior, Avenida de la Estación, Maestro Padilla, Artes de Arcos, Canónigo Molina Alonso hasta su entrada en su nueva sede canónica. Allí, en la puerta, los esperó la Hermandad de Pasión, cofradía con la que compartirán templo a partir de ahora. Toda la Junta de la corporación del Lunes Santo y el párroco de Santa Teresa, Francisco Salazar aguardó la llegada de la hermandad.

A las 19:30 horas la Cofradía de la Caridad hizo historia y entró en la Iglesia de Santa Teresa poniendo fin al traslado y diciendo hola a su nueva sede canónica. Al llegar, la corporación le impuso su medalla al citado párroco, Francisco Salazar, que desde ahora será su nuevo Director Espiritual, y también al Diácono Antonio Asensio. El acto concluyó con un solemne besapies al Santísimo Cristo de la Caridad.

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