El 18 de marzo del año 1.914 nacía Manuel Resina Resina. Un vecino de Lúcar que ayer cumplía 101 años. Sus paisanos querían darle una sorpresa y aprovechando que cada mañana sale con su andador, la cita era a las once en la Plaza del Pueblo. Estaba todo preparado, una gran tarta y café para soplar con Manuel 'el abuelo del Almanzora', unas cifras reservadas solo para unos cuantos afortunados. Un secreto, superar el siglo de vida, que el propio agasajado aseguraba desconocer "si lo supiera lo diría a todos los vecinos de mi pueblo".

El mal tiempo, el frío y la lluvia fina con la que amanecía ayer miércoles, obligaba a trasladar la fiesta hasta la casa de este hombre amable y menudo. Un hombre de campo que ha sido apoderado en las fincas de la familia de Joaquín Navarro. Terratenientes de la época y con los que Manuel ha conservado una estrecha amistad. "Don Federico era mi amigo, era un buen jefe, nos queríamos mucho" asegura. Guarda un buen recuerdo de sus años trabajando en el campo, y de quienes han sido sus patrones. Tanto es así que nos cuenta que el año pasado una de las hijas le visitó con motivo de su cien cumpleaños.

Manuel muestra un aspecto muy saludable, solo le traiciona el oído, hay que hablarle un poco alto y responde atento a la conversación. La edad no perdona en sus huesos, por eso se ayuda con un andador y cada mañana sale a pasear y recorre más de dos kilómetros acompañado por su cuidadora. Ella es su sombra y la artífice junto al propio alcalde del pueblo, José Antonio González, para que ayer le sorprendieran con esta fiesta. Su familia, sus hijos y vecinos, arroparon a Manuel en su ciento un cumpleaños. Que sean muchos más.

De esta forma, el abuelo pudo disfrutar del cariño de su gente que no dudó en darle todo el cariño en el día de su cumpleaños.