Almería

Los problemas del sexo tienen solución

  • Manuel Lucas Matheu, médico y sexólogo, ha abierto una consulta en el Hospital Mediterráneo El 30% de españoles padece dificultades sexuales

Una pareja que lleva 9 años casada no puede tener hijos porque la mujer padece un vaginismo severo que le impide el acto sexual. Ni siquiera un ginecólogo puede explorarla y este le propone hacerle una anestesia general para ello. El matrimonio decide viajar a Barcelona para realizar un tratamiento de inseminación artificial. Pero antes de hacerlo, acude a un sexólogo para intentar solucionar el problema. Le diagnostican el vaginismo y le dicen que detrás de la causa se encontraba un componente fóbico por antecedentes de abuso. Mediante un sistema de sensibilización sistemática y de ejercicios que debía realizar se solucionó todo. A los cinco meses estaba embarazada.

Manuel Lucas, exdelegado provincial de Salud, ha abierto la consulta que lleva el mismo nombre que el libro que publicó en 2009, Sed de piel, en el Hospital Mediterráneo. Una iniciativa pionera en la provincia, ya que apenas hay consultas especializadas en sexología. Siempre ha compaginado la labor docente con su trabajo, actualmente imparte clases de máster en Sevilla, Almería y Madrid.

El motivo más frecuente de consulta es la disfunción eréctil. El doctor señaló que los hombres piensan que tienen la responsabilidad del encuentro sexual y eso les causa muchos problemas de ansiedad de rendimiento, además de las posibles causas orgánicas. "La disfunción eréctil puede ser el inicio de un problema orgánico", señaló Lucas, "ya que cada vez más este hecho es un factor de riesgo cardiovascular, lo que no significa que sea así en todos los casos", aclaró.

"Es muy frecuente en el caso de las mujeres tener dificultades de lubricación vaginal, que de alguna forma sería lo paralelo a la disfunción eréctil en los hombres, pues ambas cosas dificultan la el coito", aseguró el doctor.

Se atienden también muchos problemas relacionados con el deseo sexual, tanto en hombres como en mujeres.

Otros problemas menos frecuentes son la eyaculación precoz. "Hay muchos hombres que sienten que no son capaces de controlar su eyaculación y eso les produce mucha ansiedad. Generalmente suelen ser más problemas psicológicos que orgánicos" dijo Lucas.

El vaginismo es otro inconveniente que afecta a las relaciones sexuales. Consiste en unas contracciones muy fuertes en los músculos perivaginales que impiden la penetración, contracciones que, como explicó Lucas, pueden ser incluso dolorosas. "Afecta a las mujeres y suele tener un componente fóbico o un antecedente relacionado con un trauma sexual".

Con menor frecuencia se da la eyaculación retardada o anayaculación, que se refiere a la falta de eyaculación. "También hay personas que se obsesionan con un fetiche o con algún tipo de apetencia sexual, lo que le produce de alguna forma problemas en su vida personal".

Los conflictos de pareja también afectan a la sexualidad, del mismo modo que una sexualidad alterada también acaba afectando a una relación que podría ir bien, como dijo Lucas. "Es fundamental que exista el deseo, si una persona no te pone tu cuerpo no va a responder".

Hay situaciones, dijo Lucas, en las que no funciona porque hay un problema orgánico, como problemas vasculares causados por el tabaco que impiden que la sangre llegue de forma suficiente tanto al pene como a la vagina.

Las nuevas tecnologías también han influido en las relaciones sexuales. El sexólogo hizo referencia a un estudio que enlaza la satisfacción sexual de las personas que utilizan las redes sociales para buscar pareja y su autoestima. Y la conclusión del estudio es que las personas que utilizan las redes sociales para buscar pareja suelen tener la autoestima más baja que las que no las utilizan.

"Estamos modificando las formas de cortejo", señaló Lucas. "Las relaciones a través de Internet son acorpóreas y por eso no satisfacen". La ventaja, según Lucas, es que las personas que no son capaces de realizar un cortejo directo, por timidez, puede hacerlo a través de las redes. Esto es positivo siempre y cuando se llegue a producir un encuentro físico.

Otro aspecto muy importante a tratar es la vida sexual de las personas que padecen una enfermedad crónica o que han sufrido cualquier otra patología. En referencia a esto, Lucas dijo que en los protocolos de las consultas no suele preguntarse algo que es muy mportante. "Cuando una mujer supera un cáncer de mama o un hombre tiene un infarto de miocardio, necesitan ayuda para recuperar su vida sexual. Este área de la salud de estas personas está poco atendida. Ha quedado demostrado que cuando la sexualidad se atiende es un elemento rehabilitador y no solo mejorar la calidad de vida del afectado sino que hace que mejore su enfermedad".

Resulta alarmante la elevada cifra del 30% de españoles que según Lucas padece problemas sexuales. Pero más aún que solo el 15% de ese 30% lo consulta con un profesional. Un 12% comparte su problema con un familiar. Así que, como señaló Lucas, más de un 70% de personas que tienen problemas sexuales están viviendo en silencio algo que va a ir agravándose y que puede destruir la pareja o conllevar otros problemas de salud.

Otra cuestión importante es por qué fingen las mujeres. El doctor aseguró que 6 de cada 10 mujeres alguna vez en su vida han fingido un orgasmo. ¿Por qué? Lucas explica que los hombres se sienten responsables de que las mujeres tengan orgasmos. "El hombre lo que quiere es obtener la validación de que lo que ha hecho está bien, de que ha conseguido lo que tiene que conseguir, y la mujer tiene dos opciones, o dar explicaciones después o fingir". Y añadió que "hay muchas mujeres que vienen a consulta por una anorgasmia, que es la ausencia del orgasmo. Y vienen sin pareja porque llevan 20 años fingiéndolos".

En cuanto al uso de los anticonceptivos, si nos fijamos especialmente en el preservativo, es bastante bajo.

El origen de todo esto según Lucas está en una educación sexual poco adecuada o nula. "La educación en materia de sexo se ha limitado en decirle a los jóvenes que la sexualidad equivale a peligro, y el peligro significa adrenalina, por lo que al decirle a un adolescente que use el preservativo ya que puede ser peligroso que no lo haga se produce el efecto contrario". Esto unido al alcohol y al consumo de otras drogas suele limitar su uso en los más jóvenes.

La educación sexual no tiene que ser meter miedo, tiene que ser informar y formar. Formar en conocimientos sobre sexualidad para así influir en la madurez de los jóvenes.

Pero no solo los adolescentes son reacios al uso del preservativo, los adultos también. La causa es que dicen que se pierde sensibilidad o que "corta el rollo".

En este sentido Lucas emplea el término "sexualidad gimnástica". "Ya tengo la erección, que no me la corte nada", dijo en referencia a tener que parar para ponerse el preservativo. En cuanto a la pérdida de sensibilidad, el doctor aseguró que ésta se encuentra por todo el cuerpo y no hay que centrarla en eso. "Las mujeres también son reacias a usar anticonceptivos hormonales porque piensan que les pueden producir problemas, pero ha quedado demostrado que no es así", apostilló.

Como dijo Lucas, arreglar este tipo de problemas produce una gran satisfacción. "Pasado un tiempo me encontré con la mujer que padecía el vaginismo severo y llevaba nueve años sin mantener relaciones. Iba con su hija en el carro y le dijo: ¿ves a este hombre?, pues se puede decir que es casi tu padre".

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