Manos blancas para pedir la paz. Nunca son suficientes todos los actos reivindicativos para pedir que la violencia se acabe y el mundo sea por fin un sitio en el que puedan convivir varias culturas, razas e individuos. Por este motivo, el colegio Compañía de María realizó una protesta solidaria en contra del terror con todos los alumnos del centro, desde los más pequeños hasta los más adultos.

El patio del colegio es donde alzaron su manos pintadas de blanco para pedir a los gobiernos y distintos responsables que hagan lo posible por buscar la paz.

Este acto se ha celebrado cercano a los actos terroristas que se produjeron en Bruselas y los pequeños y jóvenes estudiantes demuestran así su solidaridad con las víctimas.

Una protesta con una mirada inocente que pretende que el mundo les oiga y con su granito de arena se consiga llegar a alguien por muy poco poder que tenga.

Una mañana solidaria y de vuelta al cole después de Semana Santa con muy buenas intenciones y con ganas de mejorar el mundo.