Almería

Un mes de ayuno y ayuda a los pobres

Sus creyentes constituyen la segunda religión más numerosa de Almería. Más de 90.000 musulmanes que, a su vez, convierten a la almeriense en la provincia con mayor número de creyentes del Islám de España. Y sin embargo, hace apenas llegaron a ser aproximadamente unos 105.000, según apunta el imán de Almería, Abdellah Mhanna, quien apunta a la crisis como el motivo por el que miles de ellos abandonaron esta tierra en búsqueda de un futuro mejor.

Con todo, es palpable y evidente el importante número de musulmanes que se encuentran inmersos en la celebración del mes de Ramadán. Una celebración que se basa en el testimonio de la fe, el rezo, el ayuno, la ayuda a los pobles y la peregrinación. Como bien recuerda Mhanna, "no es solo un mes de dejar de comer y beber, sino de sentido social".

"Un sentido importante, sentirse con los pobres, con la gente que no encuentra comida, bebida, que se tiene que vivir purificando tu corazón durante un mes completo para intentar ayudar a todo el mundo", añade el imán, a la vez que apostilla que el Ramadán también significa que "debes trabajar y seguir tu vida normal evitando el sol, para que puedas decir que los ritos no son separación de la vida hacia la otra vida, sino una vida eterna, la vida y la otra vida".

Otro de los mensajes del Ramadán tiene que ver con la moral. "Hemos insistido mucho en que no sirve de nada si tú dejas de comer y beber durante el mes y engañas a tu famillia, haces daño a tus padres, vecinos, no tratas bien con los demás... el mensaje de Ramadán es un mensaje espiritual, moral más importante", apunta en este sentido.

Aunque el dato más optimista arrojaría una población total de 95.000 musulmanes en Almería, no todos están obligados a cumplir con las restricciones del Ramadán. En concreto, sólo la mitad de ellos ayudan durante este mes, ya que los niños están excluidos hasta que cumplen los 15 o 16 años. Tampoco deben ayunar los enfermos, las mujeres embarazadas o aquellos que están de viaje.

Por desgracia, el éxodo no ha concluido. Aunque en los últimos años ha sido menor, las migraciones a otros países europeos como Francia, Bélgica, Holanda, e incluso la vuelta hacia países de origen como Marruecos, Mauritania, Senegal, sigue siendo una constante.

En cualquier caso, Mhanna, los que aún permanecen por estos lares se sienten arropados y no perciben desprecio por parte de los autóctonos. "Vivo aquí desde hace ocho años y me siento almeriense, tenemos toda la amistad y cariño. Soy profesor, veo un ambiente cariñoso. También tengo amigos del barrio, vecinos, me siento aquí muy cómodo", dice el imán, a la vez que admite que "eso no significa que seamos ángeles, hay excepciones, un poco de xenofobia, racismo, pero como en todos los sitios, incluso en nuestros paises".

No en vano, Mhanna asegura se insiste a la comunidad musulmana en que "viva como una minoría religiosa dentro de la sociedad española, que son parte de esa sociedad. Que vivan no sólo los derechos, también los deberes. Que vivan con otros amigos, participen con ellos en días y noches buenas como el Ramadán, también la Navidad y Semana Santa, con los vecinos y amigos cristianos, católicos y otros".

"El mensaje nuestro es que Ramadán no es sólo un mensaje totalmente espiritual, quitar la comida y la bebida para que Dios esté satisfecho, sino que Dios nos pide que sintamos con los pobres, la gente que tiene necesidades especiales, dar todo el esfuerzo y apoyo con esa gente. Ayudar al vecino, al enfermo, dar de nuestro bolsillo a todo el mundo. Vivir de una forma espiritual el trato bueno con todo el mundo, más o menos es el mensaje importante durante el mes de Ramadán", añade.

Este espíritu es el que hace que cada noche, cuando baja el sol, se ofrezca un desayuno común en la mezquita de Almería a la gente que está en la calle, los pobres, y a algunos viajeros que no saben dónde ir. "En algunos casos podemos atender hasta cien al día".

Al ser interpelado sobre la colaboración con el Gobierno para evitar que lleguen mensajes radicales a los musulmanes, Mhanna asegura que "el 95 por ciento de las mezquitas de Almería que pertecen al centro de imanes que están con nosotros, tienen la misma mentalidad y metodología. Nosotros somos parte de la sociedad española, formamos parte de esa sociedad, somos una minoría en nuestro marco de jurisprudencia, que es Ministerio de Justicia español, y el marco religioso, que es el Islam general, moderado".

"Nosotros pensamos que somos responsables de proteger nuestra tierra de cualquier peligro, defendemos hasta perder nuestros cuerpos a favor de esta tierra porque creemos que defendemos a nuestra religión y nuestra sociedad a la vez. En el momento que la comunidad musulmana piensa que hay un peligro, directamente colabora con todas las autoridades necesarias para luchar contra este peligro aparecido. Sin límites, yo prefiero colaboración sin límites, si hay peligro a cualquier sitio o zona de nuestra sociedad, cristiana, laica, católica, musulmana, creyente o no, nosotros formamos parte de esa sociedad y defendemos a toda la sociedad, incluso a la gente que nos odie", concluye.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios