Almería

Sentir las etapas del desamor con el barroco italiano

  • La soprano Mariví Blasco y la tiorba de Juan Carlos Rivera fueron los encargados de inaugurar esta semana de música y formación en el municipio velezano

No hay mayor privilegio que comenzar el Festival de Música Renacentista y Barroca con un concierto en el Salón del Triunfo donde sus paredes cuentan historias y se mantienen firmes y sólidas para obtener que el sonido atrape al público. La soprano Mariví Blasco y la tiorba de Juan Carlos Rivera interpretaron un repertorio bajo el nombre de A che belleza para mostrar la belleza del barroco italiano.

La soprano demostró durante todo el concierto una gran capacidad de interpretación. Los matices de su voz y el ritmo que llevó durante la actuación consiguieron abstraer a los asistentes en su mundo. No faltó la expresión corporal. Su contoneo conducido por la tiorba y sus manos hablaban por sí solas.

La artista introdujo parte de las piezas con algún verso o historia sobre el desamor para que el público pudiera meterse en la piel de cada tema que fue aplaudido enérgicamente por los asistentes. Llegaron de forma paulatina en los primeros compases hasta conseguir ocupar la mayoría de las butacas disponibles para inaugurar el Festival.

"Si al final ella me ama, yo descansaré en paz; alma mía no sabes lo que es el dolor porque todavía no conoces el amor. Es mejor no jugar con el amor, fingía amor, pero no amaba. Al final su profunda mirada llegó a mi corazón", el desamor estaba presente en los versos y estuvieron muy bien interpretados de forma posterior por el músico y la soprano.

La venganza también estuvo presente en frases como "siempre he sido yo la perjudicada, y esta vez va a ser al revés". La autocompasión también se pudo respirar en el Salón del Triunfo: "Siempre toca lamentarme por amar a quien me da tormentos". El concierto transmitió las distintas etapas del desamor que puede sufrir una persona, hasta llegar a la esperanza de que algún día la amada por fin suspire por él: "Solo hallaré reposo en las puertas del cielo".

Entre algunos de los temas que compusieron el programa: A che belleza-Scrivete là, de Benedetto Ferrari; Doró dunque moriré, de Giulio Caccini; Torcata apreciada y Canarios, de G. Kapsperger; Apena il sol, de Barbara Strozzi, Non si scherzi con amor, de Stefano Landi; Amar a Dios por Dios, de D. Mazzocchi; Non é piú tempo no, de Landi; Ciacona, de Alessandro Piccinini; O che sempre tochi a me, de M. Marazzoli; y Sí solce é il tormento y Quel sguardo sdegnosetto, de Claudio Monteverdi.

El dúo fue aclamado al ritmo de los aplausos. Agradecieron la buena acogida del público con una pieza que se diferenciaba de lo interpretado con anterioridad porque según la soprano "este tema habla de la primavera, de los árboles, de los pajaritos…". Los asistentes en pie para ofrecer un sí rotundo a esta primera cita inaugural del Festival.

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