No hacía falta leer entre líneas. Fue clara y concisa: "Soy optimista y tengo razones para serlo". La presidenta de Banesto, Ana Patricia Botín, participaba ayer en una conferencia, organizada por la Cámara de Comercio de Almería y la Fundación Almeriense para la Excelencia Empresarial (Faeem), a la que concurrieron en torno a 200 empresarios y autoridades de la provincia.

Bajo el título: 'El papel de las empresas en la transformación de la economía española', Botín exponía que, aunque no es fácil reconducir la situación económica y financiera actual, "España tiene los ingredientes necesarios para crecer mejor". Reconoce que este país ha crecido por encima de la media europea, de forma desequilibrada en algunas facetas como en el consumo y la demanda interna, la pérdida de competitividad, el descuido de los mercados exteriores, en el peso de la construcción o en el endeudamiento de empresas y familias; pero señala que el ajuste se ha iniciado y ello se manifiesta en indicadores como el aumento de la tasa de ahorro.

La empresaria destacó el dinamismo y flexibilidad de la clase empresarial española, en continuo diálogo social, y con una oportunidad única para redirigir sectores, como el energético, hacia nuevos mercados. Botín coincidió, a la hora de expresar las claves para remontar este ciclo económico, con todos aquellos que en los dos últimos años han insistido en el concepto de innovación como aquello que consiste en mejorar lo presente dotándolo de valor añadido, sin necesidad de crear algo nuevo. Tanto es así que Botín señaló como medida para crear empleo y dinamizar la economía a corto plazo el reinventar el modelo de turismo y segunda residencia en España, en lugar de optar por otros sectores alternativos, pues si esto también sería correcto y complementario, según apuntaba, requiere más inversión y los resultados se proyectarían a largo plazo.

Cuatro claves dictó la empresaria para afrontar el reajuste: el desapalancamiento para ajustar los niveles de deuda, la mejora de la productividad, zanjar el déficit exterior, que llegó a alcanzar el 9,5% del PIB (Producto Interior Bruto) pero que, en estos momentos se encuentra al 5% con la previsión de llegar al 4% en 2011, y la creación de empleo en nuevos sectores y en los tradicionales.

Respecto a la productividad apuntó un dato, las exportaciones a Alemania -uno de los principales destinos de los productos españoles- son hoy un 30% más caras que hace diez años, "se ha impuesto el factor cantidad sobre el de calidad", indicó y añadió: "Tenemos que hacer un ajuste a la alemana, es decir, ganar productividad a las bravas, que es producir más con el mismo coste o producir lo mismo a menor coste". En cuanto a la mano de obra española, Botín incidió en que existe cualificada y competitiva y, a la que no lo es, que suele ser la que más sufre el desempleo, "hay que capacitarla para que trabaje en otros sectores", como apuntó en lo que tradicionalmente ha hecho bien España: en el turismo.

La presidenta de Banesto explicaba que no hay una posibilidad para España, como la hay para Estados Unidos o el Reino Unido, de un ajuste a nivel macro, "tenemos que hacerlo a nivel micro, a nivel de las empresas". El ajuste en la productividad ya se está produciendo, según la empresaria, quien señalaba que en los dos últimos años, el PIB ha caído menos que el empleo y un comportamiento positivo respecto a los costes laborales en el entorno de la Zona Euro. Mientras una de las fortalezas en España es la mano de obra, la tecnología se convierte en factor clave para las pymes a la hora de conseguir tamaño.

De cara a reinventar el modelo turístico, Ana Patricia Botín expuso el caso de Florida, con una economía parecida a la española y con características similares como el clima y situación geográfica estratégica para el acceso a grandes mercados como el estadounidense o europeo, respectivamente. "Florida ha tenido ciclos buenos y malos, pero siempre ha sabido reinventarse, siempre mejorando la calidad. Para mí es un punto de referencia, que nos puede ayudar a no sólo traer turistas, sino también empresas y trabajadores, pues cada vez son más los que trabajan por cuenta propia, y que se puedan establecer en España".