El Almería dio un paso de gigante en sus aspiraciones de meterse en la fase de ascenso después de superar al Lugo en un encuentro loco (3-5), con ocho goles, cinco de ellos en la última media hora. 

Los hombres de Javi Gracia sabían que no podía fallar en el Anxo Carro, ya que les espera un calendario terrible en las cuatro últimas jornadas (Elche, Alcorcón, Girona y Villarreal), y no lo hicieron. 

Ya a los 9 minutos se pudieron adelantar en el marcador, en un excelente pase en profundidad de Soriano que dejó a Iago Falqué completamente solo ante José Juan, aunque su remate se estrelló en el portero del Lugo. 

El partido no tenía un dueño claro, con muchos centros y llegadas a las dos áreas, aunque el Lugo también dispuso de una buena oportunidad a los 27 minutos, en un saque de esquina cabeceado por Oscar Díaz desde una posición inmejorable, pero su remate, demasiado centrado, terminó en las manos de Esteban. 

El Almería parecía perder fuerza con el paso de los minutos y a la media hora llegó el premio para el equipo local, en una arrancada de Oscar Díaz, que dejó atrás con relativa facilidad a Gunino, y a pesar de que Esteban sacó su remate, el balón quedó muerto a los pies de Iago Díaz, que sólo tuvo que empujarlo. 

El encuentro entró en una fase de dudas para el Almería, pero los rojiblancos avisaron primero en un remate de Charles que salvó José Juan con una parada espectacular y golpearon después en una falta lanzada por Corona que Christian cabeceó a la red para devolver la igualdad al marcador al final del primer tiempo. 

El descanso no sirvió para que el Lugo se recuperase psicológicamente, sino todo lo contrario, ya que Charles desperdició un mano a mano ante José Juan y, casi en la siguiente jugada, a los 49 minutos, Iago Falqué conseguía adelantar al Almería en un remate con la pierna derecha tras un centro de Christian. 

El Lugo todavía estaba tratando de asimilar la reacción almeriense cuando Charles, después de grave error en la salida de balón de la defensa gallega, definía con precisión. El partido entró en una fase loca y dejó para el recuerdo cuatro goles más en los últimos 20 minutos, con constantes alternativas, ya que cada gol del Lugo era respondido de inmediato por otro del Almería. 

Manu, de penalti, devolvía la ilusión a la afición local, pero Carlos Calvo volvía a poner la renta de dos goles , en lo que era el preludio de un error en cadena de la defensa visitante que permitía a Iván Pérez poner de nuevo al Lugo a un solo tanto, una pequeña revolución que Aleix zanjó en el añadido sentenciando.

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