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El vuelo de Goofy acaba en denuncia

  • La Guardia Civil imputa un presunto delito de maltrato animal y una sanción administrativa por violencia en el deporte al aficionado que lanzó un perro al árbitro en el C. Mármol-La Cañada

El episodio del 'lanzamiento de perro al árbitro' ocurrido en el partido Comarca del Mármol-La Cañada del pasado domingo lleva camino de costarle caro al aficionado que tuvo semejante ocurrencia. La Guardia Civil le imputaba ayer un delito de maltrato animal y una infracción administrativa por violencia en el deporte que le obligará a acudir a los juzgados de Purchena para dar explicaciones y a hacer frente a una más que probable sanción económica.

Este diario avanzaba el lunes el suceso ocurrido en el partido correspondiente a la 20ª jornada de Regional Preferente, en el que, con el liderato en juego, se congregaron alrededor de 400 espectadores en las gradas del José Juan Rodríguez de Olula del Río, feudo que el Comarca del Mármol alterna con la Ciudad Deportiva de Macael para disputar sus encuentros como local.

Con 1-1 en el marcador (3-1 fue el resultado final), el árbitro se acercó a llamarle la atención al banquillo visitante cuando vio cómo le caía desde el graderío un yorkshire terrier, que responde al nombre de Goofy, sin llegar a impactarle, circunstancia que luego recogería en acta.

En ese instante en la grada se producía un forcejeo entre el dueño del animal, José Tapia, y Clemente Domene, quien sostiene que el perro se le escurrió de las manos, lo que motivó la intervención de dos agentes de la Policía Local, que condujeron a Domene hasta la pareja de la Guardia Civil para que abriera las diligencias pertinentes en base al protocolo de actuación en espectáculos deportivos.

La noticia, por su componente inédito y surrealista, se propagaba ayer como la pólvora al conocerse la imputación del aficionado en cuestión, que mostraba su sorpresa con la repercusión mediática y reiteraba a este diario sus sinceras disculpas a todos los que hubiera podido causar algún daño, desde el perro al árbitro, pasando por los dueños de la mascota y el propio club.

Un vídeo del suceso en el que puede observarse la caída del animal captado por un aficionado allí presente circulaba ayer por whatsapp y redes sociales.

La directiva del Comarca del Mármol está a la espera del pronunciamiento del Comité de Competición, que suele darse a conocer los jueves de cada semana, pero a priori no tiene previsto emprender ningún tipo de acción legal contra el aficionado, ya que al ser identificado in situ, la denuncia va por oficio desde la Subdelegación del Gobierno.

Miembros de la Federación Almeriense de Fútbol aclaraban ayer que el club no tiene por qué sufrir multa económica o el cierre de la instalación, ya que el objeto -en este caso un ser vivo- no impactó en ningún momento contra el colegiado Martínez Azagra y todo quedaría en un apercibimiento o llamada de atención, al igual que ocurre cuando se lanzan monedas al terreno de juego sin que alcancen a nadie.

Juan González Liria, presidente de la entidad marmolista, hacía ayer un llamamiento a la cordura e insistía en que, por suerte, quedó en una anécdota: "Conocemos a los dos aficionados en cuestión, uno de ellos incluso jugó con nosotros, y siempre se han caracterizado por su buen comportamiento. Espero que impere el sentido común y puedan avenirse a entendimiento. Hay que quedarse con el trabajo que estamos realizando para subir al equipo a Primera Andaluza y la ilusión que hay en la afición".

Goofy se recupera del susto en el domicilio de sus dueños y recibe cuidados veterinarios para descartar daños en el bazo por la caída. Lo de repetir visita a un campo de fútbol es otro cantar...

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