-¿Cuándo y por qué Tito Rabat decide establecer en Tabernas su centro de operaciones?

-Fue hace ya casi cuatro años, en su cambio de categoría de 125 a Moto2. Tito era un piloto del montón y decidió dar un cambio radical a su forma de vida y de estilo de entrenamiento. Se dio cuenta de que si quería ser uno de los pocos elegidos para llegar a ser campeón del mundo debería esforzarse más que nadie y así lo hizo. Se compró una autocaravana y se vino a vivir al Circuito de Almería, donde cada día entrenaba duramente.

-En sus declaraciones tras lograr el título mundial de Moto2 daba las gracias a Almería por la acogida, ¿en qué medida le ha ayudado residir aquí para alcanzar el éxito?

-En palabras textuales de Tito, "nunca podría haber sido campeón del mundo sin la ayuda de David García y el Circuito de Almería, desde los medicos del circuito, en especial Pacao Redondo, jefe de urgencias del Hospital Mediterráneo, hasta todos los que me han apoyado desde Almería. A Nono García [padre de David] por aguantarlo todos los días".

-¿Cuál ha sido su rutina diaria de trabajo para preparar las pruebas del campeonato del mundo?

-Su rutina de trabajo ha ido variando según su evolución como piloto y sus resultados mejoraban. En su primer año en el Circuito de Tabernas solo se concentró en dar las máximas vueltas posibles, pero en el último año solo hacía cada día un simulacro de carrera [28 vueltas sin parar].

Para revalidar el titulo de campeón del mundo tenemos un plan de entrenamiento diferente que empezará en 2015 ya con vistas a subir a MotoGP en 2016.

-Usted mismo ya fue otro gran piloto tal vez sin la fortuna necesaria en su momento, ¿qué consejos le ha dado a Tito para encauzar su carrera deportiva?

-Siempre dije que yo fui campeón de España y de Europa, pero nunca pude serlo del mundo por diferentes motivos y que nunca pararía hasta que un piloto mío lo consiguiera. He intentado aconsejarlo siempre como a un hijo. Sé que soy una persona muy, muy importante en su vida y también él lo es para mí. En los últimos años nos hemos hecho inseparables y creo que todo eso le ha dado también una estabilidad que Tito nunca ha tenido. Siempre he intentado aconsejarle lo mejor posible tanto en lo deportivo como en lo personal.

-¿La competencia con su compañero de equipo Mika Kallio le ha servido para mejorar su pilotaje?

-Tito ha tenido claro desde pretemporada que si no cometía errores sería campeón mundial. Su dominio ha sido brutal y todo ello le ha llevado a ser campeón de Moto2 en 2014.

-¿El salto a MotoGP está claro para 2016?

-Si todo va como está planeado sí. Ya tenía ofertas para MotoGP en 2015, pero no eran motos ganadoras, así que ha preferido ganar menos dinero en Moto2 pero optar de nuevo a ser campeon del mundo.

-¿A qué achaca que en los últimos años tantos pilotos españoles acaben en lo más alto del podio?, ¿mucho trabajo o una generación irrepetible?

-Ambas cosas, pero sobre todo a la buena situación económica de España hace una década y con la contrucción de tantos circuitos. Hoy día algunos de estos circuitos están casi vacíos y algunos cerrados, pero la verdad es que ayudaron mucho a jóvenes pilotos para poder entrenar.

-¿Qué le empujó a Tito Rabat al motociclismo pudiendo seguir con el negocio familiar de joyerías?

-Por ahora es joven, la Joyería Rabat, propiedad de su padre y gestionada por su único hermano, es de las mejores de España. Pero Tito prefirió salir del glamuroso mundo que le rodeaba para labrarse un futuro en el deporte que ama, el motociclismo, y hoy día como campeón del mundo se puede decir que vive muy bien también gracias a su esfuerzo.

-Siempre recuerda a su malograda madre en sus victorias, ¿pero en qué medida lo ha respaldado la familia García en esta aventura?

-Su madre era un gran apoyo para él. Tito adoraba a su madre y desgraciadamente se le fue hace dos años. Por eso se arropó mucho en nosotros, donde siempre lo hemos tratado como uno más de la familia, independientemente de que ganara o no. Obviamente ahora que es campeón del mundo para nosotros es una satisfacción enorme y estamos orgullosos por él.

-El circuito de Almería en Tabernas se está convirtiendo en un referente para la puesta a punto de las mejores monturas y la preparación de cada vez más pilotos, ¿qué les atrae hasta este rincón de Europa?

-Principalmente la suerte o buen trabajo que se hizo con el diseño del circuito cuando se contruyó. Gracias a eso, al trato personal y todos mis contactos de cuando yo fui piloto del campeonato del mundo y también por la buena climatología de Almería, todo esto hace que actualmente el Circuito de Almería esté de moda y sea mundialmente conocido. El hecho que mejor define todo es que el 90% de todos los equipos del Mundial nos han elegido como único circuito de pruebas [cada equipo del campeonato del mundo solo puede realizar entrenamientos privados en un circuito del mundo, solo uno]. Es por eso por lo que prácticamente todos los circuito son deficitarios, en cambio el Circuito de Almería sigue y sigue subiendo hasta competir con Circuitos públicos como el de Jerez, Montmeló o Cheste. Casi todos los circuitos de España están con unas deudas millonarias e incluso a punto de cerrar, por eso para nosotros es una satisfacción ver cómo los equipos no eligen año tras año.