Ud almería

La zaga, una línea a reforzar

  • Dos de los tres fichajes que restan llegarán para la parcela defensiva Saveljich y Trujillo son los anhelos del conjunto unionista

 Una vez materializadas las llegadas de Álex Quintanilla y de Pape Diamanka, que se unieron a las de Miguel Ángel Corona y Fídel Chaves, a la UD Almería aún le queda mucho por hacer en los 38 días que aún restan para que se cierre el mercado veraniego. 

Todavía quedan tres incorporaciones por llegar para el plantel unionista, Fernando Soriano quiere una plantilla corta para la presente campaña, y dos de ellos serán para la parcela defensiva. Una zona del campo que ahora tiene una necesidad acuciante de refuerzos. Tal es la situación, que el canterano Joaquín disputó la primera parte del partido-entrenamiento frente al filial como central. 

 

En la zona central de la zaga solo cuenta con dos efectivos, el recién llegado Quintanilla y Morcillo, más Josema, que se presupone que sea el cuarto central. El canterano tiene ficha con el filial y se espera que juegue los partidos con el equipo de Fran Fernández, aunque estará en la dinámica del primer equipo. En caso de lesiones u otro contratiempo, el técnico maño tirará de él. Por lo tanto, la llegada de un zaguero es fundamental de cara a las opciones competitivas de la UD Almería en la división de plata del fútbol español. Los anhelos de la dirección deportiva son Esteban Saveljich o Ángel Trujillo. La llegada de ambos cuenta con nulas probabilidades de darse tras la llegada de Quintanilla. La negocación en ambos casos se antoja muy compleja. Los dos futbolistas tienen contrato con sus respectivos equipos, Racing y Levante, y estos no están por la labor de dejarlos salir sin previo desembolso económico. La escuadra argentina demanda un millón y medio de euros por la salida del montenegrino, que dejó muy buen poso en los seis meses que estuvo en el plantel unionista, y el equipo valenciano quiere recuperar el millón que dejó en las arcas almerienses el verano pasado. En este sentido la entidad de Alfonso García debe andarse con pies de plomo ya que ha realizado un importante gasto en la contratación del extremo onubense Fídel. Lo único que puede desatascar esta situación es un paso adelante del jugador, en el caso de Saveljich sí se ha dado, o  el paso del tiempo.  

 

En los laterales la situación no es más benévola que en la zona central de la defensa. El club ya ha comunicado oficialmente que no cuenta con los canteranos Antonio Marín y Charlie Took, los cuales se encuentran realizando la pretemporada a las órdenes de Soriano a la espera de que llegue alguna oferta satisfactoria para ambas partes. Así solo están disponibles Ximo Navarro y el capitán Dubarbier. El granadino y el argentino están siendo sondeados por otros clubes, aunque desde el club no se comtempla su salida si no llega una oferta irrechazable o se paga la cláusula de rescisión de cada uno. Cualquiera de estas salidas supondrían un contratiempo considerable en la planificación deportiva, aunque ahora no se contempla. En esta coyuntura, la entidad está peinando el mercado en busca de un futbolista para la banda. Para el lado derecho se podría optar por retrasar a Iago Díaz, aunque Fernando Soriano nunca ha demostrado una gran simpatía por este movimiento. En el carril izquierdo sí que es más necesario un suplente para Duba. Un mal endémico que atiza al conjunto rojiblanco desde hace ya varios años. La temporada pasada se intentó con la contratación de Goñi en el mercado de invierno, pero el remedio resultó ser peor que la enfermedad. Ahora, el fichaje de un lateral izquierdo debe ser un imperativo. Más cuando el entrenador unionista demostró en la recta final de la campaña anterior que lejos del Mediterráneo le gusta situar a Dubarbier por delante de la defensa. Tener un especialista y no tener que tirar de Ximo a pierna cambiada resulta una solución más óptima. 

 

Como comodín para todo tipo de soluciones aparece la figura de Fran Vélez. Aunque el técnico maño lo quiere preferentemente de pivote defensivo, en caso de lesión o ausencia por tarjetas podría cubrir alguna ausencia. 

 

Si importante es tener una buena sala de máquinas, también poseer una defensa férrea. La dirección deportiva aún tiene margen para que cuando comience la liga la UDA pueda presumir de ello. 

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