Ni Atlético, ni Sevilla, ni Málaga. Puede que al final el futuro de Pablo Piatti esté lejos de la Liga española, concretamente en Italia. El Udinese se ha clasificado para la disputa de la Liga de Campeones y quiere hacer un ambicioso proyecto deportivo para la próxima campaña, por lo que estaría dispuesto a poner sobre la mesa las cantidades que Alfonso García exige por el atacante argentino, su principal activo tras la venta de Diego Alves al Valencia.

El máximomandatario rojiblanco confirmaba ayer a los micrófonos de Onda Cero en la tertulia del Gran Hotel que el conjunto transalpino va en serio: "Es verdad que Udinese es otro de los equipos que lo pretende y esta semana tendremos negociaciones. Están haciendo mucha fuerza y están muy interesados. Creo que ni siquiera dejarán salir a Alexis Sánchez al estar en Champions para que cada uno juegue por una banda".

De hecho, poco después de la conclusión del campeonato italiano, el presidente albinegro, Giampaolo Pozzo, anunció que había declinado una oferta estratosférica del Manchester City por valor de 35 millones de euros para hacerse con los servicios del chileno.

No fue el único asunto que trató Alfonso García. También se refirió a la continuidad o no de Olabe: "Tengo que hablar con Roberto para verlo todo y decidir. Hay opciones y no las hay porque tengo que hablar con él y analizar todo lo que ha pasado. Estamos recopilando datos de otros entrenadores, no he hablado con ninguno porque no sería justo, pero estamos analizando el mercado. Encima de la mesa tengo muchísimos ofrecimientos de entrenadores y no sé aún por cuál nos vamos a decidir".

Respecto al capítulo de fichajes, el empresario murciano dejó entrever que no será un verano especialmente movido en el capítulo de altas: "Llegará alguno con experiencia y alguno joven. Las incorporaciones estarán entre dos como poco y cuatro a lo sumo. Extranjeros no creo que vengan muchos, la mayoría serán españoles".

Y es que la idea del club pasa por contar con un plantel de no más de diecinueve efectivos para contar de forma real con futbolistas del filial, que este año han tenido pocas oportunidades: "Si queremos que el filial tenga protagonismo la plantilla debe estar en diecinueve jugadores. En principio la ficha la tendrán del filial, así pueden subir y bajar, es por imperativo". Jugadores como Lillo, Jesús Rubio o Jonathan son quienes tienen más posibilidades de promocionarse.