El Comarca de Níjar está a un paso del ascenso a Segunda B. Ayer, sufriendo de lo lindo durante 90 minutos pero también con la posibilidad de matar en los minutos finales frente a La Nucía, el equipo dirigido por Ortega sacó un empate sin goles que hizo bueno el resultado de hace una semana en la Comunidad Valenciana. Ahora, solo resta una eliminatoria más para completar el sueño de subir a la categoría de bronce del balompié nacional.

El equipo nijareño comenzó intimidado por su rival, que era quien llevaba la desventaja del partido de ida (1-1). La Nucía empezó presionando muy arriba y dificultando la salida del balón desde la zaga azulina. En una de esas, nada más iniciado el partido, el Comarca se libró por los pelos de quedarse con un jugador menos sobre el verde. Todo vino a raíz de un forcejeo entre el delantero visitante Perona y el central local David Sánchez, que se llevó la cartulina amarilla. Si el árbitro hubiera interpretado la acción como agresión, el futbolista del Comarca se habría ido a las duchas ya en ese momento y quizás por tratarse del minuto tres de partido el árbitro le dio otra oportunidad.

Los alicantinos llevaban la voz cantante y el peligro fue llegando por la banda derecha. De inicio, con un centro chut de Javi Rosa que Nacho desvió por encima del larguero.

El Comarca trató de despertar y lo hizo por medio de Garrincha, el único jugador del once almeriense que le daría otra velocidad al juego ofensivo durante los primeros 45 minutos. Primero, el media punta no acertó a controlar dentro del área un envío de Félix por detrás de la zaga y un minuto más tarde el interior volvía a adentrarse en el área, aunque su disparo se marchó demasiado cruzado.

No gozaría de muchas más el Comarca en el primer periodo pero las que tuvo volvieron a llegar por la banda derecha. La mejor, una nueva internada de Garri que dejó la pelota en posición franca a Francis en la frontal, pero el disparo de éste fue demasiado manso a las manos de Emilio. Otra jugada, esta a balón parado, tuvo como protagonista a Fran López, que reclamó un posible agarrón dentro del área que el colegiado no vio.

Entre medias, La Nucía había vuelto a llegar con peligro de más a la meta almeriense. Rubén fue quien sembró el pánico una y otra vez en la defensa nijareña y siempre por el costado derecho. Una de sus llegadas al área acabó salvándola Gabi bajo la misma boca de gol y otra terminó con un balón al segundo palo donde Inarejos, con todo a favor, la envió fuera de los tres palos, que era lo más difícil de hacer.

Pero la presión y la ofensiva de La Nucía era constante y una falta de entendimiento entre Gabi y David Sánchez casi fue aprovechada por Perona, pero su disparo desde la frontal tampoco encontró puerta.

Hubo tregua hasta el descanso. Al Comarca le seguía valiendo el empate sin goles pero La Nucía volvería a la carga en la segunda mitad.

Y lo hizo con un gesto feo. Antonio José cayó lesionado y Nacho envió fuera la pelota. Con instrucciones de su técnico de no devolver el esférico en esos casos, no lo hizo y casi mete en un apuro al Comarca. El lateral nijareño ya no volvería al terreno de juego y le reemplazó Cobos.

El equipo de Ortega estaba muy impreciso atrás y medía mal sus pases en zonas comprometidas. La Nucía lo intentaba también desde lejos, como en un disparo de Juanfran que repelió Nacho, y metiendo más artillería en el campo con la entrada de Borja Pando.

Ortega también movió ficha e introdujo a Pigüi por un desacertado Francis. El Comarca pareció reactivarse y Raúl Alonso, en su primera aparición prácticamente en todo el partido, dispuso de una oportunidad que sin embargo mandó fuera. Los nijareños intentaban sacudirse la presión visitante mientras el tiempo pasaba favorable a sus intereses. Disfrutaron también de alguna jugada de peligro, por medio de Pigüi en una acción individual, pero su remate salió desviado. Incluso el Comarca tuvo que sobreponerse a jugar algunos minutos en inferioridad numérica, después de que Félix recibiera un golpe en el rostro que le causó una hemorragia nasal.

El choque entró en sus últimos diez minutos con todo por decidirse y el Comarca pudo matarlo en una contra. Raúl Alonso se entretuvo más de la cuenta en la frontal pero finalmente consiguió dársela a Sevilla, que había sustituido minutos antes a Garrincha. Pero el extremo tampoco encontró el fondo de la red. De haberlo hecho, hubiera sellado definitivamente el pase del Comarca a la última eliminatoria, dado que quedaban apenas tres minutos más el descuento. Como también pudo matarlo Cobos, en una internada por la izquierda, o Raúl Alonso, solo ante Emilio, cuando pasaban cuatro minutos sobre el tiempo reglamentario. Fue en esos momentos cuando el Comarca tuvo las mejores ocasiones, cuando La Nucía trataba de acumular hombres en el área rival.

Fueron unos minutos de incertidumbre, con la sensación de que podría caer un gol que fuera ya definitivo sin tiempo para la reacción, tanto por uno como por otro lado. El colegiado, el castellano-manchego Collado López, señaló el final del encuentro en el minuto 95 y fue entonces cuando se desató la euforia en el Municipal de la Comarca de Níjar, donde los aficionados esperaban ya el pitido final casi a pie de campo para festejar con sus jugadores este nuevo paso de un equipo que está haciendo historia esta temporada. La otra cara de la moneda era la de los futbolistas de La Nucía tendidos sobre el césped, recibiendo el apoyo de los seguidores nucieros que, en número reducido pero muy ruidosos, se desplazaron hasta la provincia almeriense para estar con los suyos.

El Comarca de Níjar ya está a la espera del sorteo de mañana lunes en el que conocerá al que será su último rival de la temporada, en la tercera y definitiva eliminatoria por el ascenso, y de nuevo en formato de ida y vuelta.