Finanzas

La venta de hortalizas vía avión, asfixiada por las tasas aeroportuarias

  • El sector critica que cuesta de media 2 euros el kilo y debería ser la mitad para que fuese rentable

El envío de frutas y hortalizas por avión para llegar a aquellos mercados internacionales más alejados y, en muchas ocasiones, dispuestos a pagar más por la misma mercancía, llámese Emiratos Árabes, China o Japón, entre otros, continúa siendo uno de los retos pendientes del sector agrícola almeriense.

Al eterno desafío de la concentración, o mejor dicho, organización de la oferta, se une, como uno de los más necesarios, la mejora de la competitividad a través de la logística. Para ello, el Puerto de Almería lleva años trabajando en el impulso de líneas para el envío de frutas y hortalizas hacia los principales mercados europeos, una apuesta que se ha intentado en numerosas ocasiones y, de momento, nunca ha obtenido buenos resultados.

Por otro lados, se encuentra la posibilidad de transportar la mercancía a través de avión, otro asunto que también lleva décadas en el tintero y que muchas empresas, sobre todo las cooperativas y alhóndigas de mayor volumen de facturación, han intentado poner en marcha, pero nunca lo han conseguido.

El principal escollo, según las fuentes consultadas por Diario de Almería entre el sector hortofrutícola almeriense, se encuentra en las elevadas tasas aeroportuarias que se manejan en España, donde Almería no es una excepción, aseguran. De media, el coste para enviar frutas y hortalizas a través de avión ronda los dos euros el kilo, según las mismas fuentes, mientras que para que el uso de este transporte sea viable porque ofrezca una viabilidad mínima en cuanto a precios, la cifra debería ser, al menos, un 50% inferior, es decir en torno a un euro o poco más.

La cuestión radica en que mientras existe un gran número de compañías aéreas que sí están dispuestas a poner precios competitivos para realizar estos envíos de mercancías, la coyuntura económica tan degradada retrasa aún más una posible rebaja de las tasas aeroportuarias, pues el Gobierno está más que necesitado de recibir ingresos para continuar reduciendo la deuda pública, y no está por la labor de dejar escapar recursos, sea cual sea su lugar o ámbito de procedencia.

Pero mientras en Almería el sector hortofrutícola está a la espera de que el Ejecutivo mueva ficha en este sentido, cosa que no hará a corto plazo, otros hacen el negocio gracias a que tienen unos precios competitivos.

Este es el caso de Holanda, que a raíz de su lustroso mercado de venta de plantas ornamentales, se ha convertido en la auténtica plataforma logística, no sólo de estos productos tan delicados, sino de una buena parte de las frutas y hortalizas que se cultivan en la Unión Europea, incluida Almería.

Este país centroeuropeo ha sabido leer como nadie el potencial que posee esta actividad y su gobierno decidió hace años subvencionar buena parte del coste del transporte aéreo, dejando las tasas aeroportuarias para el envío de mercancías en un precio final neto inferior, incluso, al euro por kilo, rondando en la actualidad los 0,95 euros por kilogramo, según fuentes del sector agrícola almeriense.

La Cámara de Comercio de Almería ha mantenido reuniones de trabajo con Clasa (Centros Logísticos Aeroportuarios), así como con compañías aéreas, universidades y aeropuertos españoles para medir y comparar las necesidades de la provincia en materia de envío de frutas y hortalizas con otras zonas donde se realizan con más fluidez, aunque hasta la fecha la situación continúa encallada.

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