Acaba de cumplir cinco años y puede presumir de su buen hacer a escala nacional e internacional. El Centro de Investigación en Biotecnología Agroalimentaria (Bital) se presentó en sociedad a finales de abril de 2010, en un acto en el Auditorio de la Universidad de Almería, con el objetivo de unir la investigación en materia de nutrición, salud y agricultura, con la vista puesta en trasladar los resultados al sector privado, dando así un servicio de especial interés para el sector agroalimentario almeriense, principal pilar socioeconómico de la provincia.

Hoy Bital posee cinco líneas de investigación estratégicas, que se desarrollan en el ámbito nacional e internacional y abarcan todas las áreas de conocimiento en agroalimentación relevantes para Almería, como son la agricultura sostenible, las denominadas tecnologías ómicas, que abarcan la genómica, la proteómica y la metabolómica, los bioprocesos agroindustriales, la calidad y seguridad alimentaria, y la nutrición y salud. "De manera directa o indirecta toda nuestra investigación está orientada al desarrollo de un sector agroalimentario más productivo, eficiente, sostenible y competitivo", señala Diego Luis Valera, director de Bital.

A pesar de la crisis de los últimos años, Bital ha sabido salir airoso con un enfoque, aún mayor, si cabe, hacia la excelencia y los resultados. "De hecho, ahora que empieza a verse un repunte de la inversión en I+D+i, hemos podido constatar que Bital está muy bien posicionado como centro de investigación de referencia en agroalimentación. Como ejemplo, sólo en la última convocatoria de altísimo nivel de exigencia 'Retos Investigación y Proyectos de I+D de Excelencia', del Plan Estatal de I+D+i, Bital ha obtenido proyectos por un importe total superior al millón de euros", indica Valera.

Bital posee más de 80 investigadores seleccionados por su trayectoria científica de excelencia, procedentes de diversas áreas de conocimiento complementarias, desde la mejora genética vegetal a la tecnología de invernaderos, pasando por la ingeniería química, la producción vegetal o la química analítica, por poner sólo algunos ejemplos.

Valera recuerda que gran parte de los proyectos de I+D+i se desarrollan en colaboración con entidades empresariales, tanto a nivel nacional como internacional; lo cual es sin duda un claro indicador de la orientación del Centro a las necesidades reales del sector productivo agroalimentario.

Al historial de proyectos de I+D+i nacionales e internacionales del centro, hay que sumar las más de 150 publicaciones en revistas internacionales de alto impacto científico constatable que ha generado en los dos últimos años.

"Sólo el pasado año, Bital ha participado en un total de 37 reuniones con empresas, organismos públicos gestores de investigación y otros agentes del Sistema de I+D+i; con la finalidad de iniciar y desarrollar proyectos de investigación en las líneas estratégicas para el centro", asegura.

Asimismo, Bital ha apostado por la participación activa en Fundaciones (Triptolemos), Campus de Excelencia Internacionales (CeiA3 y Red CEIs) y, plataformas tecnológicas, como medio para la articulación de la colaboración público-privada en todo el territorio nacional. En la actualidad, el Centro es miembro activo de las Plataformas Tecnológicas de Biotecnología Vegetal (Biovegen), Agricultura Sostenible y, Food for Life Spain.