Después de la importante cita para el sector pesquero celebrada en la ciudad italiana de Catania en febrero, donde se celebró un seminario de alto nivel sobre el estado de los stocks en el Mediterráneo organizado por la Comisión Europea (DG MARE) y el Consejo Consultivo del Mediterráneo (Medac, por sus siglas en inglés), sin que se adoptaran decisiones concretas, los próximos días 15 y 16 de marzo será Almería lugar donde estarán puestos todos los ojos del sector en todos los países del arco Mediterráneo.

A este órgano consultuvo, Medac, pertenecen todos los países comunitarios con flota pesquera en el Mediterráneo y en él tienen representación los gobiernos nacionales y regionales de los países miembros, además de organizaciones representativas del sector profesional, sindicatos, ONGs, científicos, pesca deportiva... en definitiva todos y cada uno de los actores con cualquier tipo de interés o actividad con el mar. En esta cita, Cepesca, como patronal española estará representada en el Comité Ejecutivo por el presidente de la Asociación de Empresarios de la Pesca de Almería (Asopesca), José María Gallart.

Esta reunión. de alto nivel, está organizada con la colaboración de la propia Asociación almeriense, que ha conseguido que se celebre en la capital por petición expresa al Medac y se desarrollará en el Hotel NH.

Uno de los temas que se abordará en este encuentro es la obligación de desembarque de especies demersales (descartes), que para la pesca de arrastre entra en vigor en 2017.

Un descarte consiste en devolver al mar las capturas no deseadas, vivas o no, por no dar la talla mínima o por no tener las cuotas para dicha especie. La Política Pesquera Común introdujo la obligación del desembarque de todo lo capturado en puerto con el fin de terminar con la práctica de tirar peces en alta mar. La obligación del desembarque, que afecta sobre todo a los barcos de arrastre (mayoría en la capital), se está aplicando de forma progresiva según pesquerías desde 2015 y hasta 2020. Esta norma, que afecta al Mediterráneo, implica que la tripulación debe subir a bordo todo lo capturado, anotar cantidades en el diario de abordo y distribuirlo normalmente en cajas para llevarlo a puerto. El caso es que la captura de especies no adjudicadas se deduce de la cantidad de especies que sí lo están.

El segundo de los temas importancia a tratar en esta reunión en la capital es la situación de las especies altamente migratorias, como el atún y el pez espada y que atañe especialmente a la flota de palangre de superficie (Carboneras). En los últimos tiempos, una de las principales preocupaciones del sector pesquero es la merma que viene sufriendo el Mediterráneo en su stock de especies. Uno de los mayores retos es el de fomentar una actividad pesquera más selectiva y, por ello, los propios pescadores ya están haciendo los deberes en Almería promoviendo cambios en aras de la sostenibilidad. Como telón de fondo siempre está el temor a que desde la Administración les imponga medidas al respecto que puedan ser drástica y, para ellos, poco ajustadas a la realidad.