EN Macael, donde el oro blanco inunda cada rincón del pueblo, hay que tener una mentalidad bastante abierta para centrarse en otras tonalidades. Así lo hizo Luis Martínez Caicedo que, a pesar de su avanzada edad cuando creó Caicedo Stone, vio la necesidad de poner en marcha una industria auxiliar a las múltiples que hay en la comarca del Mármol. Con ilusión y la experiencia que dan los años Luis utilizó un solar que tenía en el polígono industrial Rubira Sola para fundar con sus cuatro hijos Juan, Luis, Sergio y Antonio una entidad que se surtiría desde sus inicios de una base tecnológica imprescindible. En mayo del 2003 abrió sus puertas, aunque no empezó a funcionar hasta diciembre de ese mismo año. Una empresa familiar que arrancó con 5 trabajadores, y que hoy, unos cuantos años después ya cuenta con 14. Una muestra de que nunca es tarde para emprender.

Hace tan solo un par de meses Luis falleció y sus hijos tomaron las riendas del negocio. Antonio Martínez, conocido en Macael por haber alcanzado la alcaldía del municipio, nunca se había dedicado al mármol, aunque contaba con numerosos estudios que mostraban que la zona carecía de empresas de servicio que se centrasen en tratamientos de materiales, acabados, aserrados, pulimentos y corte. Decidieron cubrir esas necesidades y proporcionar esa asistencia a las múltiples industrias del sector que no tienen suficiente capacidad para tener este tipo de maquinaria.

Los comienzos fueron complicados porque poner en marcha una empresa siempre lo es, asegura Martínez, pero teníamos claro que íbamos a prestar un servicio que no había en la comarca. "Cuando arrancamos tan sólo teníamos una pulidora, y media línea para el refuerzo de materiales. Ahora ya poseemos dos líneas completas, dos pulidoras, y la ultima adquisición, una máquina de refuerzo y resinado con horno acumulador", explica el gerente de Caicedo Stone. Hasta el momento los refuerzos de materiales se hacían con luz, pero con esta nueva herramienta, y gracias a su horno se van secando las tablas más rápidamente. Un sistema que permite introducir 40 tablas a la vez y agiliza sobremanera el trabajo. Puede decirse que es lo último que hay en cuanto a refuerzo se refiere y que ha supuesto a Caicedo Stone una inversión de 800.000 euros.

Su apuesta por las nuevas tecnologías y la inversión en maquinaria de última generación les ha hecho ampliar su entidad, empezaron con 2.500 metros cuadrados de nave y ahora ya tienen 4.400.

Muchos son los clientes con los que cuentan, tanto de la comarca del Mármol como de toda Andalucía y también del Levante, aunque estiman que el 80% de ellos proceden de la provincia.

El trabajo de Caicedo Stone va desde cortar los bloques de piedra en láminas a dar el acabado que las empresas requieran, que puede ser simplemente refuerzo para que no se rompa con el corte o pulimento. En los materiales travertinos suelen tapar los agujeros con resina del mismo color de la piedra, o con resina transparente de manera que tu crees que esta el orificio y cuando lo tocas te das cuenta que es un relleno invisible. La mayoría de los materiales, sobretodo los cremas, son muy débiles y para utilizarlos hay que reforzarlos. Los hermanos Martínez hacen este tipo de trabajos y acabados que van desde el pulimento, al empaste de color o al transparente, pasando por las terminaciones en abujardado, arenado, y envejecido.

Dar un paseo por su almacén es de lo más internacional, es posible encontrarse materiales de Irán, de Turquía, India, China, Filipinas y de Marruecos.

Cada día realizan entre 800 y 1000 metros cuadrados de empastados y pulidos. Una cifra que pone de manifiesto la gran cantidad de trabajo que se elabora en Caicedo Stone.

Una entidad que también aporta suministros de material para las pequeñas industrias. "Adquirir todo un bloque para un artesano quizás es demasiado caro, por eso vienen y compran por ejemplo, tres tablas. De esta forma facilitamos su trabajo", asegura Martínez.

La empresa el pasado año alcanzó un volumen de negocio de tres millones seiscientos mil euros y que a pesar de que la situación está complicada quieren aumentar esta cifra en el ejercicio actual. Antonio Martínez destaca que hasta ahora la crisis no les está afectando en cuanto a volumen de trabajo, ya que siguen con numerosos pedidos, aunque reconoce que tienen impagados.

En Caicedo Stone han apostado por la tecnología y piensan que la mejor manera de afrontar el futuro es invirtiendo en innovación. Ahora mismo tienen la más puntera en la comarca del mármol.