Fin de Semana

Las Botas, bodega andaluza donde comer buen jamón

  • l Calle Fructuoso Pérez, 3. Teléfono: 950 234 239. www.bodegalasbotas.es.

almería

En la calle Fructuoso Pérez, una de las callejuejas en el corazón del centro de Almería paralela al Paseo de Almería, hay una bodega de estilo andaluz, con una decoración cuidada, perfecto para pasar una velada agradable en familia o con amigos disfrutando de una buena comida. Se trata de la bodega Las Botas, donde nada más entrar te topas con jamones, ristras de ajos y pimientos secos. Qué decir de las dos cabezas de toro y los cuadros taurinos que cuelgan de las paredes.

Un local con una decoración muy andaluza y con ambiente acogedor perfecto para degustar cualquiera de las sugerencias que se recogen en una carta variada en cuanto a raciones de carnes y pescado. El pescaito frito, el salmorejo -elaborado con tomate raf, propio de esta tierra- y los champiñones rellenos (segundo premio de la última ruta de la tapa de Almería) son algunas de las recomendaciones que proponemos desde este rincón gastronómico.

En esta bodega también los almerienses, y por supuesto los turistas, tiene la oportunidad de pedir platos típicos almerienses. Los encargados de la cocina tienen buena mano y preparan de manera exquisita comidas clásicas como el trigo, los gurullos o el pimentón.

También se recomienda probar sus jamones, ya que es uno de sus productos estrella. Una tapa o una ración de la marca Joselito o de piezas de Trevelez se convierten en una opción perfecta, que recomendamos acompañen con una copa de vino. Este establecimiento dispone de una completa y variada bodega. Tal es así que chatean hasta 30 vinos distintos para tomar en copa.

La Bodega Las Botas abre todos los días de la semana. El horario es de 12:00 a 16:00 horas y de 19:30 a 00:00 horas. En ese horario sus camareros, simpáticos y rápidos -algo que agradecen los usuarios- les atenderán encantados para que disfruten de una agradable velada.

La Bodega Las Botas abrió sus puertas hace ya unos cuantos años. Pero fue en 2004 cuando este negocio pasó a manos de Pedro Sánchez-Fortún Sánchez, que es su actual propietario. "Esta bodega es un lugar propicio para tapear o disfrutar de una comida informal", apostilla el empresario.

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