Afable, cercano y eternamente profesional. Así es Antonio Fernández, el director del Gran Hotel Almería, un puesto al que accedió en 2006 por méritos propios, más que merecidos, después de haber dedicado toda su vida al establecimiento hotelero más emblemático de la capital almeriense, el primer cuatro estrellas instalado en estas tierras.

Comenzó a trabajar en el hotel con quince años, recién llegado de su pueblo, Uleila del Campo, de donde su padres y cinco hermanos salieron para labrarse una vida mejor. Empezó por la base, como aprendiz de camarero y fue ascendiendo en el escalafón, pasando por todos los puestos: camarero, jefe de rango, director de Cocina, maître, director de Alimentos y Bebidas y, finalmente, la dirección del hotel, en 2006. Un año más tarde, asume también la dirección de zona de Citymar, con lo que tiene la responsabilidad de que todo esté perfecto, como él mismo se autoimpone, en los tres hoteles de la cadena en la capital, respondiendo de las más de 80 personas a su cargo, cincuenta de ellas en el Gran Hotel.

La historia de este establecimiento va ligada a la de Antonio Fernández, y viceversa. El Gran Hotel Almería abrió el 6 de diciembre de 1967 y fue inaugurado oficialmente en abril de 1968. Fernández entró en la empresa en marzo de 1969. Tanto tiempo da para muchas anécdotas y él recuerda con cariño la época dorada de Almería como tierra de cine, cuando el hotel se convertía en el cuartel general de todas las estrellas que pasaban por aquí.

Su memoria es un auténtico baúl lleno de instantáneas magníficas. "La actriz que más me impresionó fue Claudia Cardinale, sin duda. A Burt Lancaster le encantaba el color celeste para su habitación, también me acuerdo de Steven Spielberg, cuando rodó aquí escenas de alguna de las películas de Indiana Jones...".

También guarda con cariño el recuerdo de la fiesta que celebró Ringo Starr en un cumpleaños, a principios de los setenta: "Cerró medio hotel, que destilaba glamour por los cuatro costados, al estilo Hollywood; vinieron actores, modelos, otros componentes del grupo... Hubo muchísimo lujo y él acabó cantando y tocando la guitarra".

La evolución histórica de Almería está ligada al paso de los años del Gran Hotel Almería. En sus habitaciones se han hospedado los reyes y los príncipes de España y también los presidentes Adolfo Suárez, Calvo Sotelo, Felipe González y, estando en la oposición, José María Aznar y José Luis Rodríguez Zapatero. Todo el mundo artístico que ha actuado en Almería, toreros, escritores... Sería imposible nombrarlos a todos.

"Aquí tienes la oportunidad de relacionarte con mucha gente y de todos puedes absorber algo, quedarte con lo bueno de cada uno, es algo que me dijo el primer maître; la hostelería te enseña mucho".

Tras el declive del cine, el Gran Hotel Almería ha seguido siendo el referente en el sector en la capital, ahora con eventos relacionados con grandes personajes políticos y empresariales.