Guillermo de Jorge. Poeta

"En las últimas décadas, la poesía ha vivido a espaldas de la sociedad"

  • Integrante del proyecto 'Movimiento Poético: Poetas en contra del desaliento' que llega mañana a la playa de El Palmeral en El Zapillo.

Arranca la Gira Movimiento Poético: Poetas en contra del desaliento, una serie de recitales poéticos musicales que se llevaran a cabo a lo largo de la geografía peninsular y que visitará lugares tan dispares como Andalucía, Murcia, Madrid, País Vasco o Canarias. El poeta y escritor Guillermo de Jorge es uno de los integrantes de este proyecto que junto a otros escritores como Pilar Quirosa-Cheyrouze, Julián Borao, Toño Jerez, Perfecto Herrera, Antonio Jiménez Paz, Adrián Arvelo o el cantautor almeriense Andrés Rubia Pedreño, llevarán a cabo este proyecto literario que intenta acercar la poesía a la calle, marcándose como objetivo desacralizar un género literario que en las últimas décadas ha vivido un afloramiento en las redes sociales, captando de nuevo el interés de los lectores.

-¿Qué es Movimiento Poético: Poetas en contra del desaliento?

- Es un proyecto que surge de la necesidad de los poetas almerienses y canarios de involucrarse aún más en la sociedad y dar respuesta a esa necesidad que tiene el lector de contar todas aquellas cosas que pasan y que, de una manera u otra, tienen en común con la sociedad en la que vivimos. Queremos que el lector sea consciente que el poeta no vive asilado del mundo y que cuenta todo aquello que la sociedad sufre.

- ¿Cuál fue la motivación para crear este proyecto?

- En las últimas décadas, la poesía ha vivido a espaldas de la sociedad civil. Ha existido un desafecto entre los interés de la poesía y los lectores. Quizás, porque en estos últimos años se ha hecho mayor hincapié en la literatura de despacho o en la poesía artificiosa, dejando a un lado la verdadera necesidad de la comunicación y haciendo prevalecer los interés personales poéticos del escritor. Hecho respetable, pero que de algún modo ha dejado a un lado esa relación de independencia que la poesía siempre sostuvo con el lector durante siglos, existiendo incluso poetas que muriendo por el mero hecho de escribir -hasta ahí debe de llegar el compromiso del poeta con la realidad que le rodeaba-. En ese sentido, nuestra motivación siempre fue devolverle al pueblo lo que le pertenece, que es la palabra. Sin artificios, sin grandilocuencias, sin posturas pomposas. Queremos seguir haciendo una labor que siempre ha existido y simplemente no queremos que perezca.

-¿Cuáles han sido los valores en los que sean basado a la hora de dar vida a este proyecto?

- Quizás, precisamente, eso: valores. Los poetas con los que comparto este proyecto, se han caracterizado siempre por ser personas coherentes, respecto a lo que escriben y con su actitud vital con la que se enfrentan día a día en la vida. Un acto heroico que les hace nobles, pues lo que escriben forman parte de su experiencia vital y de su bagaje sensorial. No mienten y cada palabra signada en cada uno de sus versos han formado o forman parte de una yaga o de una herida.

- ¿Cuáles son las próximas citas de "Movimiento Poético: Poetas en contra del desaliento"?

- Arranca precisamente hoy. Participamos en Murcia, en Café con versos, dirigido por María Ángeles Ibernón y cerramos mañana con el Proyecto la Biblioplaya, coordinado por María del Mar Saldaña; en septiembre nos trasladamos a Madrid y, en la segunda semana, tenemos comprometidos tres recitales con poetas residentes; en octubre, recitamos en Canarias; y para el próximo año, tenemos previsto participar en el Festival Internacional de la Mujer, en el País Vasco.

- ¿Qué esperas de este proyecto?

- Esperamos acabar exhaustos. Queremos dejarnos la piel. Queremos sucumbir. Que sólo queden nuestras cenizas. Si al acabar este proyecto, terminamos así. Habrá valido la pena.

-Tu última publicación fue en el año 2007, ya han pasado siete años. ¿Tienes previsto publicar algo nuevo?

- Lo cierto es que sí. Cada cambio de ciclo suele conllevar un periodo largo de inactividad literaria. Eso es bueno. Las diferentes propuestas deben de fraguarse lentamente. Se necesita el aislamiento para encontrarse a uno mismo. Y después de ese tiempo quizás sea la hora de publicar algo nuevo.

- ¿Puedes adelantarnos algo de esos nuevos trabajos a punto de publicar?

- Tengo entre manos un libro de relatos, un libro angosto, irreverente, poco dado. Con malos modales que cuyo único fin es acercar al lector a la realidad más sarcásticas e irónica; existe a punto de ver la luz, un libro de poemas que, en legítima defensa, intenta acercar al lector a la realidad cotidiana, sin tapujos, tal cual se torna; y un diario de combate que se presenta como las experiencias vividas por un soldado en el marco de las misiones internacionales.

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