Ya somos 103 municipios. Era la frase más repetida en la comarca del Poniente y en las redes sociales ayer entre los almerienses. Desde hoy, Balanegra pasa a formar parte de ese selecto club de los municipios y abandona el estatus de Entidad Local Autónoma que ha ostentado durante cerca de tres décadas. El Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía no fallaba en las quinielas y aprobaba el decreto para la segregación de este pequeño municipio (cuenta con 2.835 vecinos) de Berja tras 28 años de autogobierno y sumaba así una localidad más a la lista que integran la provincia de Almería. Ya somos 103 y otra ELA, Fuente Victoria, dependiente de Fondón.

El expediente de segregación actual, que comenzó en 2005 promovido por una comisión vecinal, da cumplimiento a una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía y culmina al ser anterior a la entrada en vigor de la Ley de Racionalización y Sostenibilidad de la Administración Local, recurrida por el Gobierno andaluz ante el Tribunal Constitucional. Esta norma no permite segregaciones de núcleos de menos de 5.000 habitantes. Recuerda Mercedes Tapia, alcaldesa en funciones, y presidenta de aquella comisión vecinal, que un 72% de los vecinos mayores de edad votaron a favor para iniciar este proceso que finalmente ha terminado cristalizando.

Un largo y tedioso camino judicial y burocrático que tras 11 años ha permitido dar forma a un sueño y a un sentimiento de identidad que va a permitir a sus 2.835 habitantes sentirse balagrenenses al 100%. De esta segregación, el nuevo municipio de Balanegra cuenta con una superficie de 31,95 kilómetros cuadrados (el 14,5% del término original de Berja). Su casco urbano se encuentra a una distancia de 22 kilómetros por carretera del núcleo en el que tiene su sede el Ayuntamiento del que se ha segregado y que ahora ya no regirá los designios de los balagrenenses y que a su vez drena su número de habitantes pasando de los actuales 15.323 (según el último dato del Instituto Nacional de Estadística) hasta los 12.488.

Los balagrenenses se pregunta ¿y ahora qué?. Pues tras este anuncio, el decreto de segregación establece un periodo de tres meses, a partir de su publicación en el BOJA, para la constitución de la Comisión Gestora. Este órgano de gobierno provisional estará presidido por la persona titular de la presidencia de la ELA, en este caso, la nueva alcaldesa, Nuria Rodríguez (PP), y estará integrado por diez vocales que serán propuestos y designados en función de los resultados de los comicios locales del pasado 24 de mayo. Su labor será ahora la de vertebrar todo el organigrama municipal para que Balanegra tenga todas las garantías y todos los derechos que son inherentes por ser municipio. Algo que por ejemplo redunda a la hora de recibir los tributos del Estado o ayudas e inversiones por parte de la Junta de Andalucía o la Diputación Provincial de Almería.

Además, su constitución como municipio le confiere un mayor número de concejales. Hasta ahora contaban con cinco y pasaran a tener once. Según ha explicado a este periódico Mercedes Tapia, el reparto será de 7 para el PP y 4 para el PSOE. En los comicios del pasado mes de mayo el reparto se quedó en 4 a 1.

El esperado sí ha venido de la mano de la Consejería de Administración Local y Relaciones Institucionales, encargada de tramitar el expediente, considera que Balanegra cumple todos los requisitos que marca la Ley de Demarcación Municipal de Andalucía, normativa que le es de aplicación. Entre otros aspectos, destaca su adecuada infraestructura administrativa y de instalaciones, así como una equilibrada gestión económico-financiera mantenida durante los años de autogestión.

De esta forma, Balanegra es el decimoctavo municipio que se constituye en las más de tres décadas de la autonomía andaluza. El último, aprobado por el Consejo de Gobierno el pasado 17 de marzo, fue el de Domingo Pérez de Granada, segregado de Iznalloz. En la actualidad, la Junta de Andalucía trabaja en los expedientes de segregación de otros catorce municipios de la región.