rugby 3 división de honor B

Cruzado de la barba a los pies

  • Capitán del URA por veteranía, arraigo y corazón oval

  • Ve al equipo en línea ascendente para afrontar la salvación en una durísima segunda vuelta

Antoñito, en la tarde de ayer con un balón entre las manos en plena Rambla de Almería.

Antoñito, en la tarde de ayer con un balón entre las manos en plena Rambla de Almería. / rafael gonzález

El brazalete de capitán no se le da a cualquier jugador y menos en el rugby, un deporte que respeta los valores como ningún otro. Hay pautas sagradas dentro de un vestuario y ésta es una de ellas, la capitanía es tan o más importante incluso que un buen fichaje. El capitán es el ejemplo de cómo se defiende un escudo, es el jugador a seguir en los momentos de dudas, es el faro de un conjunto que además de competir, tiene que transmitir. Con más de dos décadas en sus piernas corriendo a por ensayos o empujando en las meles, Antonio Jesús Ruiz Manchón, Antoñito para los seguidores de URA, es el cruzado que guía a los almerienses en busca de su segunda permanencia en la categoría.

Su barba refleja a la perfección los años que lleva primero en el Costa de Almería, al que llevó en infantiles, y ahora en URA. En tantos años en contacto con el oval, quedó campeón de Andalucía juvenil con el Costa así como campeón de España con la selección andaluza. "Apenas había medios cuando empecé a jugar, los jugadores lesionados del equipo sénior eran los que se encargaban de los pequeños que estábamos en la cantera. Los viajes, por ejemplo, eran todos en el día, salías a las cinco de la mañana, jugabas y te volvías porque no había presupuesto. El actual proyecto de URA es el resultado del trabajo de mucha gente, de la confianza que han tenido durante la crisis, aguantando como podían al club. Miguel Palanca trajo mucha ilusión, savia nueva", asegura su capitán.

El rugby es la envidia de muchos deportes por el respeto que se le tiene al árbitro y por la confianza ciega en su capitán. Las palabras de Antoñito levantan al vestuario justo antes de cada encuentro. "Recuerdo que jugamos a este deporte por pasión, por estar con los compañeros. Tenemos que dejarnos todo dentro del campo, representamos unos colores de toda la provincia de Almería. El tema de motivación y agresividad siempre se habla, no podemos esperar a que nos metan puntos para reaccionar", además de defender con coraje a sus fieles seguidores: "Lo de la afición de Almería es precioso. Viene mucha gente a vernos y nuestra responsabilidad es cumplir con ellos. Cuando era pequeño y sólo venían a vernos nuestros amigos, nunca imaginé mirar a la grada y ver tanta gente con pancartas, camisetas, banderas...".

URA ha reaccionado en la clasificación después de un mal comienzo, a sabiendas de que la permanencia va a ser sufrida al máximo. "Con la mentalidad de que nuestro objetivo es sufrir para conseguir salvarnos, estamos afrontando esta temporada. Competimos partido a partido sabiendo que cada punto, ya sea ofensivo o defensivo, es fundamental para las últimas jornadas. Cualquier acción puede ser clave al final de la campaña para lograr la salvación", para la que el equipo ha mostrado maneras y por la que también lucharán los nuevos fichajes: "Empezamos muy dubitativos, con problemas de confianza. Conforme hemos mejorado las sensaciones, hemos empezado a desarrollar nuestro juego y terminamos la primera vuelta bastante bien. Afrontamos la segunda con esperanzas y con las ideas claras. Hace algunos partidos llegó Lucas, un ocho que nos ha solucionado muchos problemas de los que teníamos en la salida de balón de melé; esta misma semana también se ha incorporado Pancho".

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