Buena parte de las mínimas opciones de permanencia del Polideportivo Ejido pasan, de forma inexcusable, por ganar este fin de semana en el Estadio Rico Pérez de Alicante. La afición ejidense así lo entiende y por eso se está movilizando para intentar dar colorido, por supuesto celeste, porque saben que ellos tienen que ser el jugador número 12 que le de aliento a su equipo en busca de una victoria foránea que se resiste desde la tercera jornada de liga, cuando se impuso a la Real Sociedad.

No es una utopía ganar en Alicante, y menos si el conjunto celeste está arropado. El equipo alicantino ha jugado hasta el momento 18 partidos, que arrojan un balance de 7 victorias locales, 6 empates y 5 victorias visitantes. Unos números que explican porqué el cuadro herculano se ha quedado fuera de la lucha por el ascenso, a pesar de contar con uno de los presupuestos más altos de la categoría.

Sólo Numancia, Sporting, Celta, Sevilla Atlético y Elche han sido capaz de conseguir los tres puntos, el objetivo de los ejidenses, el Rico Pérez, aunque no es menos cierto que el equipo dirigido por Andoni Goikoetxea lleva siete partidos consecutivos sin conocer la derrota en casa, con 4 victorias y 3 empates.

Y es que el conjunto alicantino no pierde en casa desde el 13 de Enero, hace tres meses y medio, cuando cayó en el derbi de máxima rivalidad ante el Elche. Desde luego, no parece un buen rival para lograr una victoria balsámica, pero los celestes tienen a su favor que el Hércules no se juega nada, que su afición está muy descontenta y, sobre todo, que no va a estar sólo en una cita tan importante como ésta.