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Nadal recupera la épica

  • El tenista balear remonta en un duro partido a cinco sets ante Zverev, joven promesa alemana

  • El francés Monfils, rival en octavos de final

Nadal recupera la épica

Nadal recupera la épica

Rafael Nadal recuperó la épica de los cinco sets en el Abierto de tenis de Australia al tumbar al alemán Alexander Zverev por un trepidante 4-6, 6-3, 6-7 (5-7), 6-3 y 6-2 para alcanzar los octavos.

El número nueve del escalafón, que desde la segunda ronda del año pasado había perdido sus tres partidos a cinco sets, protagonizó una remontada que recordó por momentos a ese tenista de mente indestructible que conquistó 14 Grand Slam.

"Ganar en tres sets está fantástico porque quiere decir que estás jugando bien, pero, a nivel general, victorias así son necesarias y muy importantes para tener la confianza y la tranquilidad para que cuando sales a la pista sepas que estás preparado para superar momentos de adversidades", señaló el balear, que atravesó periodos de lesiones y ansiedad desde que ganó su último grande, el Roland Garros de 2014.

Nadal, de 30 años, lució mentalidad de hierro y piernas de acero ante Zverev, la gran promesa del tenis a sus 19 años. El alemán, 24 del mundo, acabó hundido físicamente ante la exigencia de su rival.

"Es muy importante. Si esto me dará un click o no ya lo veremos. Es un buen comienzo de año para mí", dijo visiblemente feliz Nadal. "No sé qué pasará en el siguiente partido, pero de cara al futuro es muy importante".

Campeón en Australia en 2009, el español se medirá en octavos, en la madrugada entre hoy y mañana, al francés Gael Monfils, sexto cabeza de serie, que batió por 6-3, 7-6 (7-1) y 6-4 al alemán Philipp Kohlschreiber.

Zverev, al que Nadal se refirió en la previa como un potencial número uno en el futuro, demandó hasta el límite al balear con su tenis de pura fuerza. Esa energía, unida a sus 1,98 metros y a una mente muy bien amueblada para su edad, dan como resultado un jugador total.

Once años mayor que su rival, a Nadal le tocó apretar los dientes ante Zverev. Fue un partido peliagudo, de esos en los que el palco del español no dejó de resoplar. "Le ha dado la vuelta como él sabe hacer, todavía tiene esa garra intacta y esa fortaleza mental", indicó Carlos Moyá, que se incoportó al equipo técnico de Nadal en diciembre. "Fue un partido dramático, de nervios, con mucha tensión", agregó.

En su primer y único enfrentamiento hasta ayer, hace un año en Indian Wells, Zverev falló una volea fácil con match point y acabó perdiendo. Ayer, en cambio, no llegó a disponer de una pelota de partido, pero también tuvo a Nadal contra las cuerdas. Pero eso con Nadal no es suficiente. Es un especialista en revivir, en jugar con la cabeza cuando el tenis no alcanza.

Nadal llevaba tiempo esperando una victoria así, trabajada, ante un rival de altura, a cinco sets y remontando. Era una prueba que de algún modo tenía que superar para sepultar ese 2015 de dudas y ese 2016 de lesiones.

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