El Polideportivo Ejido ha dado un paso más en la caída libre en la que lleva instalado en las últimas jornadas recibiendo la mayor goleada que ha encajado en toda la temporada, un contundente 4-0 ante el Melilla.

Y con este resultado y la imagen dada ante el conjunto norteafricano, los ejidenses volvieron a dar signos de que están viviendo su peor momento de la temporada. De hecho, ya son varios los registros negativos que ha batido el conjunto celeste en las últimas jornadas: el de mayor goleada recibida, comentado anteriormente, el de tres jornadas seguidas sin ganar, cosa que aun no había ocurrido, y el de tres jornadas seguidas sin marcar, circunstancia que tampoco se había dado a lo largo de la temporada.

Además, esta racha que lleva enlazando el conjunto celeste ha dado lugar a que el equipo se encuentre ahora más cerca del quinto clasificado, posición que, curiosamente, ocupa el Melilla con siete puntos menos que los ejidenses, que de una primera plaza en la que el Cádiz ha recuperado su 'colchón' de once puntos con los celestes y por la que, además, también pelea un Jaén que ya está a dos partidos del Poli, es decir, a cuatro puntos.

Por lo tanto, la cosa no pinta bien para un conjunto celeste que en las últimas jornadas está mostrando su peor cara. Aunque, de todas maneras, el que no pierde la compostura es un Lucas Cazorla que reconoció en Melilla el merecimiento de la derrota pero que sigue insistiendo en que "todavía queda mucho y el equipo tiene que volver a remontar el vuelo".

En cualquier caso, lo que está claro es que esta semana se avecina un largo periodo de reflexión en el seno del conjunto celeste con vistas a que la actual situación cambie en el choque que enfrentará al Poli con el Linares el próximo domingo a las 17.00 h.