El manual del buen entrenador aconseja no sacar pecho cuando las cosas han salido bien porque a la jornada siguiente pueden partírtelo y Hugo Sánchez recurrió ayer al mismo en una comparecencia ante los medios en la que quiso rebajar la euforia: "Iniciamos el partido sin la intensidad que me gustaría. La del segundo tiempo sí es la normal. Eso es lo que hablé con los jugadores. No estábamos a las revoluciones que necesita la competición. Buscamos que se muestren los 90 minutos, no en lapsos de partido. Ahora somos más compactos, pero hay ciertas distracciones que nos hacen redoblar el esfuerzo".

El toque de atención a sus jugadores no impidió que el técnico mexicano valorase en su justa medida el resultado obtenido: "Estamos contentos, los tres puntos nos ayudan a mejorar la clasificación y eso da confianza para alcanzar a los de arriba. Llevamos tres partidos seguidos remontando y buscamos que el equipo sea contundente en defensa y efectivo en ataque".

Después de varios arbitrajes desafortunados, el macho quiso romper una lanza en favor de los colegiados: "Se puso de moda que los jugadores simulen faltas y no hay fluidez de juego. Hay que intentar no engañar al árbitro porque apenas rozan a un jugador se deja caer como si lo hubieran matado".

Respecto al gol getafense, Hugo lo atribuyó a una coincidencia afortunada: "Lo no positivo es que el rival cuenta, trabaja la estrategia y está bien dirigido por Víctor. Estamos bien, pero hay que trabajar las jugadas a balón parado. Aunque su gol fue medio de carambola también cuenta y hay que estar más concentrados".

Sevilla, Barça, Real Madrid y Villarreal esperan ahora a la vuelta de la esquina, pero el azteca prefiere ir paso a paso: "Los jugadores sólo piensan partido a partido, no en los cuatro que se avecinan. No quiero preocupación ni tensión que los distraiga. Juanma no va a poder estar en Sevilla por cinco tarjetas lamentablemente. Estos puntos nos dan cierta tranquilidad, pero no conformismo".