la consulta del especialista

El increíble Llull y su cruzado

  • El crujido y el dolor hicieron presuponer la desgracia

Depresión, tristeza, incertidumbre. Así se podía resumir el estado de ánimo de la expedición española al Eurobasket, del Real Madrid, de la prensa y de la afición. El buque insignia, el gladiador que no rehúye ninguna batalla, el base sin miedo, Sergio Llull, se rompía el ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha en una acción relativamente "tranquila". Un dribling con su mano derecha, el acoso del base de la selección belga, una rodilla derecha que se flexiona 60º y un giro hacia adentro de la misma con el pie derecho fijo en el suelo; luego dolor. El crujido como cuando se parte una caña y el dolor hicieron presuponer la desgracia. ¿Cuántas veces antes Llull se ha jugado la barba en acciones mucho más agresivas, en entradas a canasta contra "armarios", en quiebros imposibles frente a otros bases o en canastas desde todos los rincones del campo; pero no, ha sido en una acción de lo más inofensiva.

La cara de dolor, la manera de agarrarse la rodilla con las dos manos, ya dio una idea de cuál podía ser el posible diagnóstico.

¿Por qué es tan importante el ligamento cruzado anterior?

La rodilla es similar a una articulación en bisagra, localizada donde el fémur (hueso del muslo) se une con la parte superior de la espinilla (tibia). Cuatro ligamentos principales conectan estos dos huesos. Ligamento cruzado anterior, que está en la parte media de la rodilla, impide que la tibia se deslice hacia delante respecto al fémur y brinda estabilidad rotacional a la rodilla. Es el principal freno de la rodilla. Tiene dos fascículos que están entrelazados entre sí a modo de trenza. Uno es el fascículo anterolateral, encargado de evitar el movimiento de la tibia respecto al fémur de detrás hacia delante. El otro es el posteromedial, que evita y sirve de tope para los movimientos de rotación, sobre todo la interna.

Ligamento cruzado posterior, que trabaja junto con el LCA e impide que la tibia se deslice hacia atrás. Los dos ligamentos se "cruzan" dentro de la rodilla formando una "X"; es por esto que se los denomina ligamentos "cruzados" (similar a una cruz).

¿Qué pasó con Llull?

El menorquín hizo una parada rápida y un intento de dribbling, en combinación con un cambio de dirección al estar corriendo y con el pie fijo en el suelo y girando la rodilla, aterrizando de un salto o extendiendo demasiado la articulación de la rodilla puede causar lesión al LCA. Las lesiones del cruzado anterior frecuentemente ocurren con otras lesiones. El ejemplo clásico es cuando éste se desgarra al mismo tiempo que el ligamento lateral interno y que el menisco interno (uno de los cartílagos amortiguadores de la rodilla). Este tipo de lesión es más frecuente en los futbolistas y en los esquiadores. Se denomina "triada". Las mujeres tienen más probabilidades de sufrir una ruptura del cruzado anterior que los hombres, pero la causa de esta situación aún no se entiende completamente, aunque puede deberse a diferencias en la anatomía y funcionamiento muscular.

Los adultos generalmente se rompen su LCA en la parte media del ligamento o el ligamento se "arranca" literalmente del fémur. Estas lesiones no sanan por sí solas.

En declaraciones realizadas tras el partido, Llull escuchó un "crujido" en el momento en que se produjo la lesión. Por supuesto, no pudo seguir jugando ya que notó un dolor muy intenso cuando apoyaba el pie en el suelo e intentaba caminar. Probablemente se produjera un derrame muy importante producto del sangrado que se ha producido dentro de la rodilla y que, probablemente tuviera que ser extraído.

¿Cuándo se debe operar?

Existen situaciones en las que no es recomendable la intervención: personas mayores de 60 años, aquéllas con un nivel de exigencia física mínimo, la rotura del ligamento es inferior al 50% del mismo o cuando la inestabilidad de la rodilla es mínima o inexistente.

Como no es una estructura que se pueda suturar o reanclar, el ligamento cruzado anterior se debe sustituir. Normalmente, lo que se suele realizar es la extracción del tercio medio del tendón rotuliano de la rodilla junto a una pastilla de hueso de rótula y otra de tibia (esta técnica se llama HTH que son las siglas de HUESO-TENDON-HUESO). Otra opción es obtener dos tendones de la cara interna de la rodilla (llamados de la pata de ganso). Ambos injertos se colocan de manera similar, realizando túneles óseo en tibia y fémur por lo que se desliza el injerto, siendo colocado dentro de la rodilla en la misma posición que el ligamento original y sujetos mediante tornillos que suelen ser reabsorbibles y desaparecen a los meses de la intervención. Se realiza mediante una intervención poco invasiva llamada artroscopia. El tiempo que debe trascurrir para intervenir la rodilla oscila entre 1 y 2 semanas. Durante este tiempo, la rodilla se "enfriará" y nos encontraremos menos inflamación.

¿Volverá el mismo Llull?

Es la duda que todo el mundo tiene. Desde luego que hay ejemplos a favor y en contra. A favor, el hombre milagro, Shawn Livingston, campeón de la NBA con Golden State y que sufrió una luxación de rodilla, es decir, se rompió TODOS los ligamentos de la rodilla y volvió a jugar al basket. En contra, Bill Walton, Danny Manning o Derrick Rose entre otros. Nunca volvieron a ser los mismos, perdieron la chispa y la agresividad de antaño.

La recuperación tiene dos etapas: los tres primeros meses que son más de camilla y fisioterapia para recuperar la movilidad y la fuerza, hacer bicicleta y ejercicios que nada tienen que ver con su profesión y una segunda etapa, los segundos tres meses en los que sí se sentirá jugador de baloncesto otra vez y podrá hacer ejercicios de readaptación adecuada para que el juego del INCREIBLE LLULL no se resienta y pueda deleitarnos con "mandarinas" imposibles.

Estoy seguro que Llull volverá a ser el de siempre, simplemente Llull.

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