No pueden quedar los dos, sino uno de ellos. El Emilio Campra, nada más acabar el partido por tierras extremeñas, comienza a coger medida lo que será una batalla sin precedentes. No le queda otra a URA que ganar con bonus ofensivo e impedir el bonus defensivo de su rival. Si eso es así se eludirá el descenso directo, quedando la promoción en manos madrileñas, ya que está a tiro Ingenieros Industriales pero recibe a Olímpico sin que se juegue nada. Es como toca pensar para dejar atrás lo antes posible una derrota que dolió por el modo en el que se produjo. Unión Rugby Almería dejó de ser bajo la lluvia extremeña el equipo que reaccionó hace varias semanas.

Siempre por detrás en el marcador, el partido comenzó a abrirse tras un proceso de maduración que favoreció a los locales. Extremadura CAR Cáceres quiere ser el primero de la División de Honor B real, la que está por detrás de CRC Pozuelo y Liceo Francés, que se jugarán la primera plaza en un choque espectacular en Hortaleza el próximo fin de semana. Así lo demostró por la convicción con la que afrontó el choque ante los cruzados, que se vieron muy superados precisamente donde no tendría que haber sido así. Pero cuando las cosas no salen, poco se puede hacer más allá de luchar y de darlo todo, que fue lo que se hizo.

Las malas decisiones sobre el campo lastraron a URA incluso más tras el paso por vestuarios. Sabedores de que en realidad el rival no era mejor, los hombres de Pablo Jiménez sin embargo no encontraron el tono adecuado. Las cuentas son claras y en la mano de Unión Rugby Almería está, sin mirar a otros campos, eludir el descenso directo.