Tras la última reunión de la comisión de seguimiento del diálogo social celebrada ayer, el ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, anunció que el Gobierno aprobará unilateralmente una serie de medidas contra el paro. Para sindicatos y empresarios, las acciones se quedan cortas para frenar la destrucción de empleo. Corbacho adelantó que el próximo viernes el Ejecutivo informará al Consejo de ministros de una serie de iniciativas cuyo coste rondará los 1.500 millones de euros y que entrarán en vigor dentro de "un par de meses".

El titular de Trabajo explicó que algunas de las medidas necesitarán instrumentación legal, vía decreto-ley y con tramitación de urgencia, por lo que deberán ser convalidadas en las Cortes. Respecto a la discrepancia de los agentes sociales, Corbacho recordó que el Gobierno se comprometió a no adoptar medidas son consenso en el caso de reformas laborales, pero no en el resto de iniciativas de este campo.

¿De qué iniciativas se trata? Por ejemplo, de eliminar los periodos de espera entre el fin de la prestación contributiva por desempleo y el cobro del subsidio asistencial o facilitar la contratación indefinida de trabajadores en paro que cobren prestación para utilizarla como una bonificación dirigida al empresario que contrate a estos trabajadores. Así, la empresa que contrate a estos trabajadores podrá bonificarse el 100% de la cuota empresarial a la Seguridad Social, hasta alcanzar un máximo equivalente al importe de la prestación que el parado tuviera pendiente de recibir a la fecha del contrato. Otra de las iniciativas consiste en reponer, con un límite de 120 días, las prestaciones por desempleo a los trabajadores a los que se les haya suspendido el contrato de trabajo por causa de un ERE de suspensión temporal que deviene definitivo. También se creará una nueva línea ICO dirigida sólo a medianas empresas.