Finanzas

Un mercado digital evita intermediarios al agro y mejora los márgenes

  • El proyecto https://m2ad.net, que elimina costes de intermediación, comenzará a operar en marzo

  • Los productores pondrán vender a través de móvil o tablet

El corazón del campo almeriense late a golpe de crisis. Por culpa de ellas, y también gracias a ellas, siempre ha sobrevivido y ha sabido dar un paso al frente. En diciembre de 2006, cuando el isofenfos metilo torpedeó la credibilidad de la seguridad alimentaria de las hortalizas almerienses por culpa de una partida de pimientos con residuos de este pesticida ilegal, pocos presagiaban el incremento tan espectacular que iba a experimentar el uso del control biológico en los cultivos bajo plástico, que hoy ya superan el 80% de las 30.000 hectáreas de superficie de invernaderos de Almería.

En la actualidad, planea una nueva crisis sobre el sector. Un desafío que amenaza, desde hace décadas, con convertirse en estructural. Se trata de los bajos precios en origen, un factor que se ha convertido prácticamente en una característica más de la agricultura almeriense, que depende excesivamente de dos factores externos: la climatología y el nivel de producción de sus competidores, lo que unido a la volatilidad de las cotizaciones, por tratarse de productos perecederos, provoca una situación que los agentes del agro almeriense tachan de indefensión ante el escaso poder de negociación de los productores en origen a la hora de fijar el valor de sus hortalizas.

Sin embargo, a grandes males, grandes remedios. Para paliar esta situación de fragilidad de los agricultores almerienses, considerados el eslabón más débil de la cadena agroalimentaria, nace M2AD, una plataforma digital (https://m2ad.net), o según Mar Garrido, socia directora del proyecto, un Mercado Alternativo Agrario Digital, que permite poner en contacto directo a los productores con las potenciales empresas compradoras (cadenas de supermercados, intermediarios de alimentación, restaurantes, hoteles, bares, cafeterías, comedores colectivos, empresas de catering...), ahorrando de este modo intermediarios y, por lo tanto, mejorando los márgenes comerciales para ambas partes. Por un lado, el agricultor puede comercializar más caro de lo que lo haría a través de una cooperativa, una alhóndiga o cualquier canal tradicional existente en la actualidad en origen; y el comprador adquiere más barato de lo que compraría el mismo producto a otros agentes intermedios de la cadena.

El proyecto surge hace un año y medio, a iniciativa de tres socios, dos de ellos de negocio (uno enfocado hacia los productores y otro hacia los compradores) y otro, tecnológico (CardConsulting).

Aprovechando la tendencia al alza hacia el mundo digital que han emprendido los agricultores, surge esta oportunidad de negocio. "Somos un mercado alternativo, no queremos competir con las cooperativas ni con las comercializadoras, supone una apertura de fronteras en paralelo a los canales tradicionales", explica Mar Garrido, una de las responsables del desarrollo tecnológico.

Se trata de "un marketplace agrario en un entorno BtoB (bussiness to bussiness), una plataforma que se posiciona como un nicho de mercado, que permite al productor vender una parte de su cosecha a través del canal digital, con una mayor rentabilidad gracias a que elimina costes de intermediación, dando plena libertad en la fijación del precio de venta y de compra", puntualiza.

El proyecto es pionero en el sector y supone un punto de apoyo a la hora de resolver, al menos, en parte, la situación actual de indefensión del agricultor a la hora de establecer un precio digno y rentable para sus productos.

"Hemos preparado una versión piloto que estaba disponible el pasado mes de diciembre y creemos que a principios de marzo podrá estar operativa la plataforma para su uso comercial", señala Mar Garrido.

Los socios fundadores son almerienses, un factor importante a la hora de desarrollar la iniciativa, pues conocen de primera mano la problemática e idiosincrasia del sector hortofrutícola almeriense.

El Mercado Alternativo Agrario Digital arrancará con media docena de productos, los que suponen el 80% de la comercialización hortofrutícola nacional: tomate, pepino, calabacín, pimiento, berenjena y sandía, aunque existe la posibilidad de ampliarlo a cualquier producto agroalimentario.

La plataforma digital M2AD se podrá utilizar a través de cualquier dispositivo con conexión a internet, ya sea un portátil, una tablet o un smartphone. Está diseñada para que el manejo sea muy intuitivo, ágil y sencillo. El productor, cuando entre en el sistema, podrá introducir un lote para su venta y ponerle el precio que considere, para que alguno de los potenciales compradores lo adquiera; en paralelo, la herramienta también mostrará las necesidades de los compradores para que cualquier productor pueda aceptar su demanda si le satisface el precio fijado.

"Calculamos que hay 60.000 potenciales vendedores y 400.000 compradores que, a través de la plataforma, los ponemos en común", indica Mar Garrido, que prevé que en un año la herramienta llegará a Europa.

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