Cultura

Níjar recrea la 'Trilogía del dólar' de Leone en la era de Los Albaricoques

  • Se presentó el libro 'La Almería de Sergio Leone' de Juan Gabriel García y Juanen Pérezl En la Era se recrearon escenas de tres películas de Leone rodadas entre 1964 y 1966

Níjar recrea la 'Trilogía del dólar' de Leone en la era de Los Albaricoques

Níjar recrea la 'Trilogía del dólar' de Leone en la era de Los Albaricoques

Níjar volvió ayer de nuevo a rememorar la época dorada del cine en Almería con Locos por el Spaghetti Western, una actividad que se conmemora todos los años en Los Albaricoques, donde se recuerda el pasado cinematográfico de este municipio, escenario de grandes rodajes.

La protagonista de este año ha sido la Trilogía del Dólar, compuesta por las películas Por un puñado de dólares, La muerte tenía un precio y El bueno el feo y el malo, dirigidas por Sergio Leone que se rodaron en estas localizaciones hace ya más de 50 años.

Los fieles seguidores de Leone volvieron a reunirse ayer en Los Albaricoques

Locos por el Spaghetti Western comenzó ayer a las seis de la tarde con la presentación del libro de Juanen Pérez Miranda y Juan Gabriel García titulado La Almería de Sergio Leone, momento en el que este director, junto a un joven y desconocido Clint y la música de Ennio Morricone de fondo cambió la vida del pequeño pueblo de Los Albaricoques para siempre.

Tras la presentación tuvo lugar una charla-coloquio sobre la publicación y la influencia de Leone en la provincia, con la participación de actores y cineastas de esa época, abordando el pasado, presente y futuro del cine en Almería.

A las ocho de la tarde en la Era de Los Albaricoques se recrearon varias escenas de La Trilogía del Dólar en las que se contó con extras y jinetes de cine, con la presencia de Antonio Ruiz Escaño Niño Leone, homenajeado en la pasada edición. A las diez y media de la noche en la Era de la Calle Sergio Leone se proyectó un montaje con todas las escenas de La Trilogía del Dólar rodadas en el municipio de Níjar.

Además, este año desde el fin de las actuaciones hasta la proyección permanecieron abiertas las dos cantinas del pueblo, los bares-restaurantes La Parada y el Alba. Un año más, el cine estuvo presente en los Albaricoques. El año próximo se celebran los 50 años del rodaje de la película Hasta que llegó su hora.

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