PUNTO y final a una temporada deportivamente muy brillante, sobresaliente, con una octava plaza impensable al principio, pero que se ha conseguido con total merecimiento. En cuanto a la organización, el Almería sí que debería mejorar para estar a la altura de la categoría en la que se milita.

Mientras disfrutaba de la victoria en Montjuic, me acordé de la noche del 8 de septiembre del año 1979. Era sábado y la pasé frente a la radio. Era la primera vez que un equipo de Almería jugaba en primera división. Fue en Sarriá frente al Español. Anoche, frente al mismo equipo, disputó la unión deportiva su último partido en la máxima categoría hasta la fecha. Curiosidades del destino.

Sin embargo las cosas han cambiado mucho, y el futuro de los rojiblancos en la élite se atisba mucho más sólido que antaño. Y es que la posible marcha de Emery no debe afectar de la misma manera que lo hizo en su momento la de Maguregui. Alberto Benito ya ha renovado, y en ese sentido el Presidente está tranquilo. Alfonso García ya tiene planificada gran parte de la próxima plantilla.

Sin embargo, la situación de Emery puede dar un giro de 180 grados, porque anoche mismo, al acabar el encuentro, Alfonso García dejó entrever que pueden venir jugadores muy importantes en el futuro. Incluso personalmente llegué a intuir que esas incorporaciones podrían hacer recapacitar al entrenador guipuzcoano.

Yo realmente creo que Emery siempre ha tenido la intención de no renovar. Está en su derecho, pero demasiada demora para lo que todos adivinamos. Seguimos a la espera.