Los profesionales sanitarios, que ya veían precaria la situación de la sanidad , andan preocupados por la eminente puesta en marcha del Plan Verano de la Junta. Y no es para menos pues sobran motivos para hacer saltar todas las alarmas si se recuerda que el pasado año en este periodo se cerraron en nuestra Comunidad más de 2.500 camas y el 55% de los quirófanos, sin olvidar que el 80% de los Centros de Salud colgaron, por la tarde, el cartel 'cerrado por vacaciones' provocando un auténtico colapso en las urgencias. Lo peor es que 2017 va por el mismo camino al 'calcarse' un Plan con el que la Junta dará de que hablar, como en 2016, por esos contratos precarios al 50% y 33% de jornada para sustituciones que ni superan el 45%, ante el recorte de 65,4 millones que sufrió la partida de refuerzo de personal. Cómo es posible que, a pesar de las advertencias de sindicatos y profesionales, pongan 'en jaque' ese servicio universal que es la sanidad por la falta de voluntad política de un gobierno incapaz de resolver un problema endémico que como 'el día de la marmota' se repite una y otra vez. Acaso desconocen que Andalucía es la comunidad que menos invierte en Sanidad (sólo 1.050 euros por habitante), la segunda que más empleo sanitario ha destruido con la pérdida de 6.000 profesionales o la que menos camas por 1000 habitantes tiene y eso sin tener en cuenta el Plan. ¿Qué le pasa por la cabeza al gobierno andaluz para incurrir en el error de un Plan que agrava la situación? En serio ¿necesitan más evidencias que las 'mareas blancas' que salieron a la calle o más razones que los miles de andaluces que protestaron por los recortes sanitarios? La situación no puede ser peor en el Hospital de Torrecárdenas, donde sindicatos hablan del cierre de 200 camas. Si es así volverá la imagen de enfermos en los pasillos de urgencias esperando una cama, salas de espera saturadas y lo peor profesionales, ya sobrecargados de por si, incapaces de absorber el volumen de pacientes por estar la plantilla a la mitad. Más intolerable casos como el Centro de Salud de San José de Níjar donde dejaron sólo a un conductor para atender las urgencias en una época donde esta zona costera triplica la población. El Plan Verano no es para ahorrar, debe ser una oportunidad de reducir listas de espera, resolver los problemas de rehabilitación o consultas externas. No justifiquen hablando de frecuentación, porque ésta la crea el SAS al tener menos servicios cuando no hay menos enfermos. Con el ex presidente del Colegio de Médicos de Almería, Francisco Ortega Viñolo y la doctora Concha Reyes, aprendí los entresijos de una sanidad que si se salva es por el esfuerzo sobrehumano de sus profesionales. Como defensora de la sanidad pública, exijo a la presidenta que deje de recortar, escuche al colectivo, apueste por eliminar el déficit de infraestructuras, invierta los 100 millones en personal sin ejecutar y haga frente a los cambios urgentes que piden sindicatos, sociedad y profesionales, pues de no hacerlo será el sistema de salud el que tenga que ingresar de urgencia por falta de respuesta.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios